Un incidente reciente en las inmediaciones de un conocido centro comercial, ubicado en el suroriente de Quito, ha generado alarma entre los residentes del valle de los Chillos y la capital. “Por la seguridad de nuestros hijos”, así comenzó una publicación en redes sociales.
Según el relato de un padre, cuya identidad se mantiene en reserva, su hija adolescente y una amiga fueron víctimas de un robo por parte de dos mujeres que operaban con un modus operandi sofisticado.
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El incidente ocurrió en el parque aledaño al centro comercial, un área considerada segura por la presencia de guardias y transeúntes.
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Dos presuntas delincuentes, haciéndose pasar por promotoras de cursos de cocina, lograron aislar a las menores y, bajo amenazas, les sustrajeron teléfonos celulares, joyas y dinero. Para evitar sospechas ellas obligaron a las víctimas a fingir una despedida amistosa.
El denunciante expresó su frustración debido a la respuesta de las autoridades. Según su testimonio, una agente de la Policía Nacional informó que se trataba de una banda conocida, pero sin una denuncia formal no se podían tomar acciones.
Además, según la publicación de un hilo en la red social X (antes Twitter) señaló que la falta de facturas de los objetos robados impidió presentar una denuncia en la Fiscalía.
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El centro comercial, por su parte, estaría en una posición delicada. Aunque ha colaborado con la investigación, restricciones legales le impide entregar grabaciones de seguridad directamente a los afectados.
Sin embargo, desde la Fiscalía General del Estado (FGE) se informó a este Diario que, de haberse presentado la denuncia, la institución puede solicitar los videos al centro comercial mediante un impulso investigativo.
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Además, las facturas de los artículos se pueden solicitar si estos se encuentran en manos de sospechosos. Es decir, para denunciar el hecho, no era necesaria la presentación de facturas.
Este incidente ha reavivado rumores sobre la presencia de bandas organizadas en la zona, incluyendo ‘sacapintas’ y otros grupos delictivos. La comunidad ha pedido mayor seguridad y acciones concretas por parte de las autoridades para proteger a los ciudadanos, especialmente a los menores de edad.
Las autoridades policiales no han emitido aún un comunicado oficial sobre este incidente específico o sobre las medidas que se tomarán para reforzar la seguridad en la zona. (I)
