Días después del suceso que reunió a una gran cantidad de personas en el parque Navarro, en la intersección de las avenidas Manuela Sáenz y José Tobar, en el centro de Quito, los moradores del sector San Pablo se mantienen en alerta por si, una vez más, antisociales se acercan al barrio para robar.
Durante una noche de principios de mayo, una turba enardecida atrapó y golpeó a tres presuntos delincuentes que habrían asaltado a personas y negocios del lugar.
El parte policial indicó que cerca de 100 vecinos atacaron el rostro y el cuerpo de los sujetos.
Publicidad
Francisco F., morador del sector, aseguró que están cansados de la inseguridad en los alrededores.
“Uno debe caminar atento para que no se le acerquen a pedir plata o con ganas de quitarle las pertenencias. Por ello, no queda más que hacer justicia por mano propia”, indicó.
Ministro de Salud visita Taisha donde se han reportado ocho menores fallecidos por leptospirosis
Su hermana Kimberly también contó que, por las noches, el parque es oscuro y ese es el escenario propicio para que los antisociales hagan de las suyas.
Publicidad
“Amedrentan a jóvenes, mujeres, niños y personas de la tercera edad. No les importa nada”, indicó.
Ambos enfatizaron que no estuvieron presentes la noche en que los infractores fueron aprehendidos, pero afirmaron que los gritos de auxilio y el sonido de las alarmas son algo que se escucha constantemente, según los vecinos.
Publicidad
Agentes del circuito policial Itchimbía 3-4 señalaron que, tras recibir la alerta por parte del sistema de emergencias ECU911, acudieron al lugar y constataron que los ciudadanos se encontraban en el suelo.
Alta demanda de mascarillas tras anuncio de medidas de prevención por fiebre amarilla y tosferina
Tuvieron que pedir apoyo a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) La Vicentina para lograr controlar la situación.
Una vez que las personas se calmaron, los uniformados tomaron a los sujetos y los trasladaron al lugar correspondiente para continuar con los protocolos establecidos. (I)
