El periodista Guillermo Lizarzaburo y el empresario Juan Pablo Paz, ambos sentenciados a dos años de prisión por el delito de calumnia, fueron legalmente notificados de la demanda y citados a comparecer durante el proceso previo a la sentencia, pero decidieron no asistir, asegura el demandante y exasambleísta Pablo Muentes Alarcón.

La sentencia, que está en apelación, incluye una reparación de 80.000 dólares que cada uno de los dos sentenciados debe pagar a Muentes, quien afirma que ambos lo tildaron de traficante de tierras en una serie de tuits que alcanzó a materializar dentro del proceso antes de que fueran eliminados.

“Las cuentas y los tuits sobre los que versa la causa son de Lizarzaburo y Paz, tanto es así que procedieron a eliminar una de las cuentas e hicieron suspender la otra una vez que conocieron sobre la existencia del proceso a fin de ocultar el ilícito. Felizmente antes de presentar la querella ya se había materializado ante un notario público el contenido de los tuits”, asegura Muentes, quien pidió el derecho a la réplica sobre lo que Lizarzaburo asegura en torno al caso a EL UNIVERSO.

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Periodista sentenciado a dos años de prisión afirma que el fallo no está bien motivado y lo apeló

El demandante indica que el periodista lo hostigaba en la red Twitter: “Empezó a atacarme diciéndome que soy un traficante de tierras, tagueaba (etiquetaba) a la Embajada de Estados Unidos solicitando que me quiten la visa, me insultaban, el señor retuiteaba”.

La acusación de Lizarzaburo, dice Muentes, se basa en la compra de un terreno realizada por un familiar del exasambleísta. “Me acusaban de que esa propiedad era mía porque tengo otros terrenos por esa misma área, pero no es así, los papeles están a nombre de quien compró ese predio. Les dije por qué no me buscaron como afectado, pero no lo hicieron y siguieron atacándome”.

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Un audio, también materializado ante un notario, indica Muentes, es otra de las supuestas pruebas que presenta de las calumnias por parte de Lizarzaburo. En la grabación, un hombre indica que Muentes es un traficante de tierras y que habría huido a Miami.

“Es la voz de él, eso lo voy a poner como nueva prueba dentro del proceso, aparte de los tuits. El señor Lizarzaburo lo que hace es atacar”.

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Muentes cuenta que la defensora pública que el Estado determinó ante la inasistencia de los demandados, comunicó al juez en la audiencia que uno de los procesados, refiriéndose a Paz, contestó el celular, pero al escuchar que se trataba del proceso cerró el teléfono, afirma. ”Decidieron no comparecer seguramente para alegar la nulidad en la apelación, pero las calumnias realizadas en mi contra son innegables”, asegura el demandante.

El caso se dirimió en la Unidad Judicial Multicompetente de Samborondón, en Guayas, donde dice Muentes que colocó la denuncia, ya que vive en ese cantón. El juez Carlos López Vulgarín emitió la sentencia condenatoria en la audiencia del 11 de mayo pasado bajo los lineamientos del art. 182 del Código Orgánico Integral Penal, que tipifica la calumnia. El político había iniciado el proceso el 28 de julio de 2022 cuando era asambleísta alterno de Soledad Diab.

“Ojalá que en la apelación los jueces que conocen el caso ratifiquen la sentencia de estos señores para que se vayan a la cárcel los dos, que es donde deben estar. Existe el derecho a la libertad de expresión y prensa, pero también mi derecho a la honra, al honor y al buen nombre mío están protegidos. El señor no debía hablar lo que no es, no debió calumniarme, entonces debe de pagar, si se comete un ilícito se va a la cárcel. Qué casualidad que se enteran justo cuando son sentenciados, como no sabían antes porque la sentencia no fue pública”, señala Muentes.

Respecto a monto de la reparación, Muentes asegura que ha pedido que el dinero sea depositado como donación a la Sociedad de Lucha contra el Cáncer (Solca). (I)

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