En medio de las crecientes tensiones geopolíticas en Medio Oriente, con el conflicto entre Israel e Irán, el ataque de Estados Unidos contra instalaciones nucleares iraníes y los recientes bombardeos a bases militares estadounidenses en Catar e Irak a manos de Irán, se han encendido las alertas a nivel mundial, avivando temores de un conflicto a gran escala que podría tener consecuencias devastadoras para la humanidad.
Aunque por ahora se trata de una hipótesis, el escenario de una Tercera Guerra Mundial ya forma parte de la conversación pública, alimentando la preocupación sobre las posibles consecuencias y los lugares más seguros donde sobrevivir.
Los países seguros ante una Tercera Guerra Mundial
Además de la capacidad de sostener a su población, algunos territorios presentan características que los hacen más seguros por su ubicación o políticas neutrales. A continuación, se detallan algunos de los sitios considerados como potenciales refugios ante una guerra nuclear:
Publicidad
- Antártida: A pesar de su clima extremo, su aislamiento y falta de valor estratégico la convierten en un lugar improbable de ataque.
- Islandia: Su posición geográfica remota y su postura neutral la colocan entre las más seguras, aunque podría verse afectada por residuos radiactivos del continente europeo.
- Nueva Zelanda: Aislada en Oceanía, posee geografía montañosa y mantiene una política exterior discreta. Su neutralidad la aleja de ser blanco directo de ataques.
- Suiza: Reconocida por su histórica neutralidad y su sistema de refugios nucleares, Suiza es considerada un modelo de preparación ante emergencias de esta magnitud.
- Groenlandia: Este territorio autónomo de Dinamarca, poco poblado y alejado de los principales focos de conflicto, también figura como un posible refugio.
- Bután: Este pequeño país asiático, enclavado en el Himalaya, ha mantenido una política internacional reservada, evitando involucrarse en conflictos globales.
- América del Sur: Argentina, Chile y Uruguay destacan por su capacidad agrícola y su relativa desconexión de los conflictos geopolíticos de las potencias, lo que los convierte en territorios con mayores probabilidades de sobrevivencia.
Además de la violencia directa, uno de los mayores peligros asociados a una guerra mundial es la amenaza de hambruna a gran escala.
Investigaciones recientes indican que en caso de un conflicto nuclear, regiones densamente pobladas como Estados Unidos, Canadá, buena parte de Europa y Rusia sufrirían pérdidas humanas masivas por desnutrición.
Solo en Estados Unidos, se estima que más del 98% de su población—alrededor de 312 millones de personas— estaría en riesgo debido al colapso de la producción agrícola y de las cadenas globales de suministro. (I)