El gobierno británico reconoció este martes que le perdió la pista a 200 menores de edad que llegaron al Reino Unido sin sus padres y en busca de asilo, levantando las alarmas sobre la falta de seguridad otorgada a los niños y jóvenes en estado de vulnerabilidad.

Desde julio del 2021, 4.600 menores migrantes no acompañados han sido admitidos en hoteles del país, pero cientos han desaparecido bajo el cuidado de las autoridades británicas. Así lo admitió el ministro de Inmigración, Robert Jenrick, en el Parlamento.

La diputada del partido ecologista Caroline Lucas, que cuestionó a Jenrick sobre el caso, calificó de “horrible” que “niños vulnerables sean abandonados” por el ministerio del Interior.

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En el plazo de un año y medio se denunciaron 440 desapariciones y 200 niños siguen sin ser localizados. De ellos, 13 son menores de 16 años y sólo uno es una niña. El 88% de los jóvenes dados por desaparecidos son albaneses, los demás proceden de Afganistán, Egipto, India, Vietnam, Pakistán y Turquía.

“La realidad incómoda para nosotros es que si desapareciera un solo niño emparentado con alguno de los presentes en esta sala, el mundo se pararía” dijo el legislador del Partido Laborista, Peter Kyle. “Pero en la comunidad que represento ha desaparecido un niño, luego desaparecieron cinco, luego desaparecieron una docena, luego desaparecieron 50 y actualmente han desaparecido 76 y no pasa nada”, continuó, refiriéndose a 76 jóvenes que desaparecieron de un hotel en la ciudad de Brighton.

Ese incidente fue denunciado por The Guardian, cuyo artículo citando a fuentes de protección de menores y un funcionario anónimo del Ministerio del Interior explica que los menores fueron secuestrados en la puerta del hotel y metidos a carros.

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El gobierno conservador británico ha sido criticado en los últimos meses por las condiciones de acogida de los cada vez más numerosos migrantes irregulares que llegan por mar desde las costas de Francia.

La portavoz laborista de Inmigración, Yvette Cooper, acusó al gobierno de “una total dejación de funciones que está poniendo en peligro a los niños”. (I)