El Comité internacional por la libertad del exvicepresidente Jorge Glas dio detalles este martes, 3 de septiembre, sobre el estado de salud del ex segundo mandatario e hizo un llamado a organismos internacionales, como la Cruz Roja, a conformar una misión que visite la cárcel en la que se encuentra recluido desde abril pasado para constatar el deterioro de sus padecimientos.
La abogada Sonia Vera, defensa internacional de Glas, dijo que no han recibido la autorización para que el médico internista del exvicepresidente pueda atenderlo dentro del centro carcelario y contó que al momento toma más de 40 medicamentos diarios debido a los múltiples cuadros clínicos que tiene y su condición de salud mental y que han sido recetados por especialistas del mismo sistema carcelario. Algunos de estos serían benzodiacepinas, que generan dependencia y provocan sedación.
Vera rechazó también que, hasta el momento, el Estado ecuatoriano no haya respondido a la supuesta solicitud formal de México para que se conceda el salvoconducto a favor del exvicepresidente y que presentó meses atrás a través del Gobierno de Suiza, con el cual suscribió un acuerdo el 15 de junio de 2024 para salvaguardar los intereses mexicanos en Ecuador, algo que también hizo la Cancillería ecuatoriana.
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El pedido a Suiza se habría presentado el 5 de agosto por México y solicita la excarcelación de Glas y que sea trasladado a un lugar seguro.
Asimismo, Vera hizo un llamado a la comunidad internacional para poner fin a las presuntas violaciones a los derechos del ex segundo mandatario.
Alejandro Barreto, el médico internista que atiende a Glas desde 2022, indicó que la situación médica, mental y nutricional son preocupantes y alertó de que en estos últimos meses ha empeorado mucho más lo que, a su juicio, puede ser intencional para que el mandatario pueda intentar quitarse la vida nuevamente.
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“Más de 40 pastillas en un solo día... la polifarmacia está contraindicada por nosotros como médicos, porque produce más trastornos y aumenta la sintomatología no deseada... una de estas consecuencias son las alucinaciones, que pueden aumentar”, dijo y comentó que es necesario un cambio de entorno y no solo el cambio de los medicamentos recetados, que aseguró podrían estar siendo prescritos debido a que es una vía más sencilla en el caso de una persona privada de la libertad y no sería intencionado.
El galeno manifestó que esta alta ingesta de medicamentos deriva en un deterioro de órganos como los riñones y reveló que luego de revisar el historial clínico de cuando fue hospitalizado, el pasado 8 de abril, por un intento de suicidio, no fue tratado por especialistas mentales lo que considera una omisión de parte del Estado.
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Barreto dice que el Ministerio de Salud Pública está obligado a dar atención psicológica en casos de intento de suicidio y que Glas recibió el alta sin ser valorado sino cuando su condición sea estable. Contó que en el examen físico se relatan hematomas y laceraciones en el cuerpo del exvicepresidente, lo que evidencia que recibió maltrato físico y que habría provocado una contusión pulmonar que no pasó a mayores.
La legisladora correísta Sofía Espín contó que ha visitado en tres ocasiones a Glas y que ha podido constatar de primera mano el grave estado de salud y las condiciones infrahumanas en las que supuestamente se encontraría. Además dijo que hacen responsable al gobierno de Daniel Noboa por el deterioro del exvicepresidente y su vida. Cuestionó que se impidan las visitas ya que, a su criterio, al exvicepresidente “lo están matando” y confirma que es un trofeo político para el Ejecutivo.
Espín rechazó que Glas es un reo de alta peligrosidad, por lo que no debería estar recluido en La Roca, que está diseñada para presos de otro tipo de conductas.
Se refirió también al habeas corpus que recibió el expresidente de la Judicatura Wilman Terán, el pasado 12 de agosto, para trasladado de la cárcel de máxima seguridad La Roca, de Guayaquil, hasta la cárcel 4 de Quito, para cumplir prisión preventiva debido a su condición médica y psicológica. Esto, para ella, es muestra de que no se aplica la justicia de la misma forma para Glas a quien le han sido negados dos de estos recursos.
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Por su parte, Sacha Llorenti, coordinador general de esta organización, denominada Comité internacional por la libertad del exvicepresidente, habló de que se trataría de un caso de tortura química en contra de Glas debido al número de medicamentos que ingiere y que se debe investigar si esto proviene de alguna instrucción desde el Gobierno Nacional.
Llorenti, quien reiteró que para ellos el exvicepresidente es un asilado político mexicano secuestrado en una cárcel de Ecuador, dijo conocer de otros casos de reos ecuatorianos que denuncian omisiones en sus tratamientos médicos. Manifestó que el pasado 22 de agosto presentaron una solicitud para que el comité visite la cárcel La Roca y que hasta ahora no han recibido respuesta.
Por su parte, Tamara Lajtman, miembro del Observatorio Lawfare, adelantó que el comité desde hoy empezará una campaña para dejar en claro a nivel nacional e internacional que la vida de Glas corre peligro y exigir que se permita darle acceso a una verdadera atención médica y psiquiátrica.
Glas está recluido en la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil. Tiene dos sentencias en firme en los casos Odebrecht y Sobornos 2012-2016, cuyas penas se unificaron en ocho años, y además una orden de prisión preventiva en el caso Reconstrucción de Manabí, que está en investigación. (I)
