La mansión ocupa un poco más de media hectárea. Está rodeada de árboles grandes. En la parte posterior hay un patio con piscina que va a dar a un estero, donde se pueden parquear yates. Varias pruebas judiciales muestran que una empresa ligada a John Pólit, hijo del excontralor general Carlos Pólit Faggioni, compró esa propiedad, la remodeló y la volvió a vender.