Ecuador se conmocionó la noche del viernes por la violenta muerte del velocista olímpico Álex Quiñóñez. En medio de un estado de excepción, que esta semana llevó a los militares a controlar las calles, el atleta fue asesinado junto a otra persona en el noroeste de Guayaquil.

Una primera verificación realizada por la policía del distrito Nueva Prosperina indica que el velocista de 32 años estaba conversando en la calle cuando fue asesinado en la manzana 431 del sector Colinas de la Florida.

Junto al deportista fue acribillado Christopher Arcalla Ramírez, de 23 años, quien era cantante de música urbana. El crimen quedó grabado en videos que revisa la Policía.

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Según Mario Cazco, jefe policial subrogante del distrito Nueva Prosperina, Quiñónez y Arcalla se encontraban en esa zona cuando fueron interceptados por dos sujetos que se bajaron de un vehículo de color blanco. Enseguida, los individuos dispararon en varias ocasiones en contra del deportista y Arcalla.

Los cuerpos cayeron sobre la calzada y los atacantes huyeron en el vehículo. Personas que estaban cerca en ese momento corrieron para cubrirse de las balas. Luego, se acercaron para socorrer a las víctimas.

Minutos después llegaron efectivos policiales para constatar el hecho. Ante la confirmación de las muertes de los dos ciudadanos, también acudió personal de Criminalística y de la Dirección Nacional de Muertes Violentas (Dinased). La alerta de los disparos en la zona fue recibida a las 21:20 en el ECU-911.

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Los agentes policiales verificaron videos de cámaras de vigilancia en esa zona para comenzar a identificar a los atacantes. Luego se inició un operativo para la localización de los responsables de estos asesinatos.

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Cazco manifestó que en el sitio fueron recabados 25 indicios balísticos. Familiares de Quiñónez comenzaron a llegar a la zona del crimen.

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Pasada la medianoche, los dos cadáveres fueron trasladados hacia el Laboratorio de Criminalística, ubicado en la avenida José Rodríguez Bonín, en el oeste de Guayaquil.

Cazco indicó que se está investigando el móvil de estos asesinatos. El uniformado aclaró que Quiñónez no tiene antecedentes penales ni procesos investigativos.

Arcalla no registra antecedentes judiciales, pero sí tiene procesos investigativos por tenencia ilegal de armas y el delito de intimidación. Extraoficialmente, la Policía maneja la hipótesis de que Quiñónez fue una víctima colateral.

La mañana de ayer, familiares de Quiñónez se apostaron en los exteriores del Laboratorio de Criminalística para retirar su cadáver. En una carroza fúnebre, algunos de ellos esperaban la salida del cuerpo.

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Ellos se abrazaban, lloraban, realizaban llamadas a otros allegados en Esmeraldas. Una tía de Quiñónez contó que él se dirigía a comprar comida rápida en la zona junto al padre de su pareja, cuando fue sorprendido por los atacantes.

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Ella narró que se enteraron de la noticia luego de observar videos en redes sociales. Enseguida acudieron a la zona del crimen para verificar si Quiñónez era una de las víctimas mortales.

Cerca de las 09:00, varios familiares del deportista presentaron una denuncia por este hecho en la Fiscalía del Cuartel Modelo, en el norte.

Pasadas las 13:00, el cadáver del deportista fue retirado del Laboratorio de Criminalística. Familiares lo trasladaron hacia un inmueble en las calles Sedalana y Carchi, en el sur de la ciudad, donde él vivió su infancia. Mientras el féretro con los restos de Quiñónez era descendido de la carroza fúnebre por familiares, algunos vecinos y allegados lo recibieron con aplausos hasta ingresar a la vivienda.

Se indicó que el cuerpo del deportista iba a ser trasladado a su natal Esmeraldas la tarde de este sábado 23, para ser velado y recibir sepultura.

Familiares del deportista pidieron que este asesinato no quede en la impunidad y que los responsables de estas muertes violentas sean capturados. La Policía se mantiene realizando operativos para localizar a los atacantes. (I)