A diario, tanto Fuerzas Armadas como Policía Nacional ejecutan operativos en diferentes localidades de Ecuador como parte de la declaratoria de conflicto armado interno vigente desde el martes 9 de enero, según Decreto Ejecutivo 111, que reconoce como grupos terroristas a 22 bandas del crimen organizado transnacional que operan en el país.

Ecuador experimentó durante la segunda semana de enero del 2024 un escenario de violencia criminal sin precedentes, como la irrupción de antisociales cubiertos con capuchas y armados en TC Televisión, donde tomaron como rehenes a un grupo de trabajadores temporalmente, hecho que se transmitió en vivo.

‘El control dentro de las cárceles va a ser responsabilidad de Fuerzas Armadas y Policía”, señala jefe policial, al estimar que más del 50 % de delitos extramuros se genera en reclusorios

En paralelo hubo incidentes en varias cárceles, con funcionarios retenidos, más de 200, que fueron rescatados la noche del sábado 13.

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A la par de la declaratoria de conflicto armado interno, desde el lunes 8 rige en el país y en el sistema carcelario un estado de excepción que se mantendrá por 60 días. Esto incluye toque de queda entre las 23:00 y 05:00.

Del 9 al 16 de enero la fuerza pública, que tiene disposición de neutralizar a los grupos considerados terroristas, ha detenido a 1.753 personas, de las cuales 158 serían procesadas por su supuesta participación en el delito de terrorismo. Siguiendo el proceso legal respectivo, los aprehendidos a quienes la justicia dictamina encarcelamiento están siendo derivados a los distintos reclusorios del país.

Julio Ballesteros Vaca, exviceministro de Rehabilitación Social, considera que sería estratégico que se acondicionen pabellones de un solo centro carcelario para ubicar allí a quienes sean procesados por terrorismo y otros delitos graves en este escenario de conflicto armado interno.

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Él cree que la cárcel de Latacunga, cuya capacidad instalada efectiva es de 4.894 internos, según consta en la web del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), entidad que maneja los recintos penitenciarios, sería la mejor opción, pues está alejada de concentraciones de poblaciones y se encuentra cercana a un fuerte militar.

El Centro de Rehabilitación Social Cotopaxi n.º 1 o cárcel de Latacunga tenía hasta el 29 de diciembre del 2023 una población de 4.280, según el SNAI.

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Evidencias encontradas en las requisas y revisiones en el Centro de Privados de Libertad de Esmeraldas en esta semana. Foto: Cortesía Fuerzas Armadas. Foto: Fuerzas Armadas

“Tanto la cárcel de Turi, de Cuenca, como todo el complejo penitenciario de Guayaquil (cinco recintos), si bien están un poco distantes de las capitales de las provincias, ya tienen población, viviendas, asentamientos casi junto a estos centros de rehabilitación (...). En Latacunga usted tiene prácticamente campo; no hay actividad agrícola muy fuerte en el entorno; tiene la facilidad de que a pocos kilómetros, no creo que superan los 10 kilómetros, tiene un fuerte militar”, sostiene el exfuncionario que considera sería un error agrupar a todos los detenidos en un recinto en el que estén todos los integrantes de las bandas delictivas a las que pertenecen.

Según el general Víctor Herrera, comandante de la Zona 8 de Policía (Guayaquil, Durán y Samborondón), la jurisdicción con más asesinatos del país, aquello habría pasado tiempo atrás en los reclusorios y por eso es que, a su juicio, las cárceles se convirtieron en centros de operaciones de los hoy considerados grupos terroristas.

“Ecuador es el único país donde se distribuye o se clasifica a los delincuentes (presos) no por media, baja o alta peligrosidad, sino de acuerdo a qué grupo criminal pertenecen. Entonces, es lo que se dio y lo que se logró es darles poder y que verdaderamente los centros penitenciarios se conviertan en eso: en cuarteles de operaciones”, refirió el jefe policial este martes, 16 de enero, en entrevista con Radio City.

Alexandra Zumárraga, exdirectora de Rehabilitación Social, cree válido que se destine a la cárcel de Latacunga a los procesados por terrorismo, considerando la infraestructura y capacidad. Sin embargo, ella menciona que la derivación a los centros penitenciarios se da en función de la jurisdicción donde se produzcan las capturas, para facilitar las diligencias judiciales correspondientes.

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“Hay que llevarlos a las audiencias, porque son bastantes audiencias, entonces, si por ejemplo un terrorista cae en Esmeraldas, yo no lo puedo llevar hasta Cotopaxi porque eso implica todo un trámite de traslado lo cual también es un riesgo de inseguridad”, refiere la exfuncionaria.

‘Ecuador es el único país donde se distribuye a los delincuentes (presos) no por media, baja o alta peligrosidad, sino de acuerdo a qué grupo criminal pertenecen’, dice jefe policial de la Zona 8

Por su parte, el general Víctor Herrera, comandante de la Zona 8 de Policía, sostuvo que la permanencia de los controles de las fuerzas del orden en las cárceles “minimizaría” el impacto de delitos en las calles. Según él, más del 50 % de los delitos que se dan extramuros se origina dentro de las cárceles.

Actualmente, el SNAI tienen la custodia de los privados de la libertad. Hasta el 29 de diciembre del año pasado había 30.804 internos en las 36 prisiones de Ecuador, de acuerdo con cifras oficiales de la entidad. (I)