El periodista de TC Televisión José Delgado había salido del medio público para realizar coberturas periodísticas en la calle, cuando sus compañeros fueron amenazados, vejados y retenidos en contra de su voluntad en las instalaciones de la televisora, ubicada en la av. de las Américas y Joaquín Orrantia, en el norte de Guayaquil.
En medio de los reportes iniciales por la incursión armada, en un video viralizado en redes sociales, el pasado martes, al comunicador se lo ve corriendo con su micrófono mientras su camarógrafo lo acompañaba para cubrir una serie de movimientos inusuales que se presentaban a las 14:10 en la av. de las Américas, a la altura del Cuartel Modelo, a más de un kilómetro de distancia del sitio de la incursión del grupo delincuencial.
“Pensábamos que era un accidente, un robo, un asalto, un sicariato o algo, pero nunca imaginamos que era a nuestros compañeros que en ese momento ya los habían sometido sorpresivamente, porque esta gente irrumpió y sorprendió a los guardias”, narró Delgado, durante esta mañana.
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Pese a encontrarse afuera de la televisora, Delgado dijo que también vivió momentos de angustia por el temor de que afecten la integridad de sus compañeros de trabajo.
Luego del ingreso de un grupo armado al canal, en varios puntos de la urbe se desplegaron unidades policiales y militares por diversas alertas. En los exteriores del Cuartel Modelo, por ejemplo, cerraron el paso en la av. de las Américas para evitar la circulación cerca del destacamento policial.
En medio de ese escenario, el periodista decidió movilizarse hacia las cercanías del canal público. Se ubicó a una cuadra y media de las instalaciones, debido al cerco montado para la operación que realizaron las fuerzas del orden para rescatar a los compañeros. Un contingente de 120 uniformados participaron en esta operación.
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En ese lapso, él contó que realizó llamadas para tratar de conocer sobre el estado de sus compañeros, pero se volvió dificultoso recibir una respuesta desde adentro. Algunos colegas compartieron su angustia a través de grupos de WhastApp para pedir ayuda a las entidades de seguridad.
Esos minutos se volvieron angustiantes, dijo Delgado.
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“Fue terrible porque al ver la manera belicosa, audaz, terrible, osada de colocar (explosivos)... llegar a esos niveles fue algo angustiante. Queríamos volver con nuestros compañeros, emocionalmente nos sentíamos con las manos atadas, en ese momento solo pedimos a Dios que no disparen”, dijo el comunicador.
Luego del operativo, que se extendió por 1 hora con 15 minutos, la Policía pudo rescatar a unos 40 empleados del canal y neutralizar a 13 sujetos que estaban en el predio. Además afuera retuvieron a cinco personas más, que también serían parte del grupo.
Delgado expuso que este escenario de toma de rehenes y las amenazas con armas y explosivos a los periodistas marca “un antes y un después” en la actividad de la comunicación en Ecuador.
“Ayer le tocó a los compañeros, les tocó vivir una pesadilla, algo que realmente aún no salimos del impacto. Hay que tener mucho cuidado y tratar de tomar las medidas preventivas, esperar que la Policía también haga su trabajo y un momento dado pueda darnos la seguridad necesaria”, expuso.
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Un día después del acto calificado como terrorista, el periodista retomó sus labores con la cobertura de los avances investigativos en relación a los 18 aprehendidos por esta incursión armada en TC Televisión. Estos sujetos serán procesados por el delito de terrorismo, aunque la Policía sigue en indagaciones, pues presume que deben haber más personas que participaron como autores intelectuales de la incursión armada.
Delgado auguró que las medidas de seguridad implementadas por las fuerzas del orden y decretos dictaminados por el Gobierno puedan devolver la tranquilidad que necesita la sociedad. (I)
