Un hombre lleno de nervios porque tenía adheridos al cuerpo catorce tacos de dinamita, en los exteriores de una joyería de Sauces 9; una puerta destruida por la detonación de un artefacto en la avenida Casuarina; y el abandono de otro elemento similar en una gasolinera de Pascuales son solo tres de las novedades más recientes en Guayaquil.