El rostro de Michelle M. mantenía huellas de las picadas de mosquitos. Las picaduras se produjeron durante los cuatro días que permaneció secuestrada junto con su amiga en una zona rural de Manta.
Publicidad
La familia de la joven realizó una misa de acción de gracias.
Publicidad
El rostro de Michelle M. mantenía huellas de las picadas de mosquitos. Las picaduras se produjeron durante los cuatro días que permaneció secuestrada junto con su amiga en una zona rural de Manta.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
¿Tienes alguna sugerencia de tema, comentario o encontraste un error en esta nota?
Es en ese instante cuando entendemos la importancia de la huella dejada por aquellos sabios que se han ido.
Publicidad