Familias destrozadas por la pérdida inesperada de alguno de sus integrantes. Por el asesinato de niños inocentes que fueron alcanzados por las balas mientras hacían deberes dentro de sus casas o descansaban en sus dormitorios, como ocurrió en la cooperativa Guayas y Quil (Guasmo), sur de Guayaquil, la noche del lunes 11 de diciembre.
Ese día antisociales irrumpieron en una vivienda y mataron a tres pequeños, de 7 y 5 años y a una bebé de 5 meses en brazos de su madre, una mujer de 24 años que tras luchar por su vida 48 horas no resistió las heridas y también murió.
Negocios cerrados o cuyos dueños despidieron personal y trabajan con las puertas a media altura, porque fueron víctimas de ataques con explosivos tras negarse a pagar extorsiones, conocidas como ‘vacunas’, secuestros a plena luz del día y balaceras en la vía pública.
Más del 70 % de los crímenes de 2023 se concentran en estos 30 cantones
Es parte del escenario impuesto este año por los grupos de delincuencia organizada (GDO) en la Zona 8, integrada por Guayaquil, Durán y Samborondón, la jurisdicción que hasta el 11 de diciembre reportó 2.587 muertes violentas desde el 1 de enero, es decir, 1.174 crímenes más que en el mismo periodo del 2022, cuando la cifra llegó a 1.413 homicidios intencionales.
La cantidad actual representa un incremento del 83,1 % y la ubica como el territorio con más asesinatos a nivel nacional. El país tuvo entre el 1 de enero y el 5 de diciembre de este año más de 7.200 crímenes.
La Zona 8 está conformada por doce distritos: diez corresponden a Guayaquil, uno a Durán y uno a Samborondón, por lo que el Puerto Principal concentra el mayor número de homicidios, en medio de lo que las autoridades gubernamentales han identificado como una disputa entre bandas delictivas por territorio para microtráfico y otros ilícitos, como las extorsiones, secuestros, robos y demás.
Estos grupos al margen de la ley sirven, a su vez, como brazo armado y logística de los carteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, que operan en el país y mueven droga hacia el mercado norteamericano y europeo, contaminando contenedores de carga exportable.
Si se compara la estadística del 2022 con la de este 2023 se evidencia que los cinco distritos con más muertes violentas son los mismos, pero hay una variación en el orden. El primero de la lista sigue siendo Nueva Prosperina, que entre un periodo y otro tiene un incremento del 70,6 % de crímenes.
Este es uno de los territorios más extensos, ubicado en el noroeste de la ciudad, donde surgieron muchos asentamientos irregulares que aún no cuentan con la mínima infraestructura y servicios públicos. La geografía irregular de este sector incluso hace inaccesibles algunos puntos para la Policía Nacional.
En Nueva Prosperina la entidad del orden ha identificado la presencia de las bandas Águilas-Fatales y Lobos-Tiguerones, que se dedican a delitos como el tráfico interno de sustancias sujetas a fiscalización, sicariato, usurpación de terrenos, asalto y robo a personas, robo de motos, robo de carros, extorsiones y secuestro.
El año anterior el distrito Sur era el segundo de la lista con 200 crímenes, pero en este periodo a ese lugar escaló Durán, que registró hasta el 11 de diciembre 406 muertes violentas. Este es el distrito que tiene más incremento porcentual de asesinatos con relación al 2022 (244,6 %).
En Durán, cantón de la provincia de Guayas, según la Policía, se disputan territorio los Chone Killer y los Latin King, y en medio de esa ‘guerra’ se han desatado masacres como la ocurrida el sábado 2 de diciembre en las inmediaciones del centro comercial ubicado en la vía Durán-Boliche.
Cinco personas fueron asesinadas antes de caer la noche.
El coronel Jorge Hadathy, jefe del distrito Durán, señaló que entre junio y julio hubo un repunte de crímenes porque esta disputa entre bandas se recrudeció, ya que cada una espera dominar totalmente el territorio para actos ilícitos. Y para eso, el fin de los antisociales es que solo quede un grupo delictivo en el cantón.
“Se han hecho varias intervenciones. De hecho, Durán es de los distritos que más productividad tienen en lo que es armas de fuego, armas blancas, recuperación de vehículos, de motos. Y los resultados están a la vista. Nosotros hemos tenido varios enfrentamientos en los que ha habido policías heridos y fallecidos”, refirió el jefe policial.
Por ello, desde inicios de diciembre con el nuevo Gobierno, policías y militares ejecutan operativos conjuntos en sitios estratégicos de Durán y del resto de distritos más conflictivos de la Zona 8.
“La intención nuestra es identificar a ciertos brazos de las bandas que no han sido todavía identificadas y, obviamente, poner a la luz cuáles son las personas que están participando y sus niveles de mando en los diferentes GDO”, comentó Hadathy.
El jefe policial hizo un llamado a la ciudadanía a colaborar con la seguridad. Dijo que hay quienes no proporcionan información sobre el cometimiento de algún ilícito y existe negativa a denunciar los hechos al margen de la Ley.
Expertos en temas de seguridad como Renato Rivera, coordinador del Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO), creen que Durán se ha convertido en una especie de centro de acopio de droga y eso ha vuelto conflictiva a esta localidad. Allí se almacena mucha de la sustancia que luego es trasladada a los puertos de Guayaquil para ser enviada a mercados internacionales.
¿Qué se puede hacer en este Gobierno que tendrá año y medio?
Según Rivera, Ecuador cerrará este 2023 como el país más violento de América Latina, por encima de Venezuela y Honduras. De seguir la tendencia al alza, el país culminará el año con alrededor de 7.600 crímenes y una tasa de 45 homicidios intencionales por cada cien mil habitantes.
“La tarea número uno es reducir los homicidios, pero desde un ámbito focalizado, es decir, una estrategia focalizada de reducción de homicidios. No se puede tratar el problema en todo el país de la misma manera, sino que debe hacerse de manera focalizada, concentrando todos los esfuerzos de las instituciones del Estado en Guayaquil. No únicamente la Policía, no únicamente las Fuerzas Armadas de manera aislada”, expresó él.
El exfiscal provincial de Guayas Antonio Gagliardo cree que deben reforzarse las tareas de inteligencia de la Policía Nacional, que los uniformados puedan infiltrarse en las bandas para desarticularlas.
“Hemos tocado ya fondo. Ya no se respeta a niños, mujeres embarazadas, personas inocentes, ancianos. Ahora matan en la vía pública, se meten a las casas, a las ciudadelas privadas, vacunan (extorsiones). Es un Estado fallido el que vivimos, las autoridades, la Policía, las Fuerzas Armadas son unos convivados (sic) de piedra, medio hacen algo, no pueden lograr más cosas. Ya la delincuencia le ha perdido el respeto a todo el mundo”, refirió el abogado en libre ejercicio.
El distrito Sur es ahora el tercero con más crímenes. Tuvo 374 hasta el 11 de diciembre, cifra que representa un alza del 87 % respecto del año anterior. En dicho territorio tienen incidencia bandas como Los Lagartos, Lobos y Mafia 18.
De hecho, según la Policía, el atentado del lunes 11 en el Guasmo, en el que fueron asesinados cuatro niños y su madre, no era para esta familia sino que estaba dirigido a integrantes de Los Lagartos que estaban en una vivienda adyacente, donde después del crimen múltiple se hallaron evidencias de explosivos, entre otros objetos.
Las bandas delictivas han extendido su accionar hasta los brazos de mar y el principal puerto de exportación del país (Contecon) por ser un punto estratégico para el envío de droga a puertos internacionales, según la institución policial.
Pascuales se mantiene como el cuarto distrito con más asesinatos, al igual que en 2022. Ahora este territorio reportó hasta el lunes anterior 247 homicidios, el 76,43 % más que el año pasado.
En este territorio Águilas, Lobos y Tiguerones se dedican a hechos ilícitos, como tráfico interno de drogas, extorsión, sicariato, secuestro extorsivo y colocación de artefactos explosivos.
Las extorsiones son una constante en Pascuales y a quienes se niegan a pagar las denominadas ‘vacunas’ los antisociales atacan los negocios con explosivos. Locales de cadenas de electrodomésticos, farmacias, ferreterías, entre otros, han sufrido las consecuencias de la violencia criminal en este año.
Y ante esta situación es común ver varios locales cerrados, con letreros “Se alquila” a lo largo de la calle principal de Pascuales, donde hasta los conductores de tricimotos son víctimas de los extorsionadores y deben pagar valores que van desde $ 5 semanales.
Esteros es el quinto distrito más violento de la Zona 8 con 221 homicidios, el 56,74 % de que tuvo el año pasado, cuando ocupó la misma ubicación en el cuadro estadístico policial.
Allí hay incidencia de las bandas Lagartos, Lobos y Fatales-Águilas, que cometen hechos ilícitos como robo de vehículos y motocicletas, expendio de drogas y extorsiones.
Desde el 6 de diciembre militares y policías ejecutan operativos conjuntos en los distritos Nueva Prosperina, Durán y Sur, pues concentran el mayor porcentaje de asesinatos en la Zona 8.
“También estamos articulando y fortaleciendo los operativos con investigaciones y el eje de inteligencia para levantar información con los objetivos de mediano y alto valor, tener una desarticulación de las estructuras criminales que vienen causando temor”, expresó ese día en Durán el general Víctor Herrera, comandante de la Zona 8. (I)
