El Bloque de Seguridad informó que la madrugada de este domingo, 25 de marzo, abatió en un enfrentamiento a Jaime R., alias Quevedo, presunto cabecilla de la banda Gatos Secos.
La operación se ejecutó en el cantón Pedernales, en el norte de Manabí. Justamente en esta ciudad el grupo delictivo tiene su accionar, según datos de la Policía.
Desde allí maneja el narcotráfico y se disputa la zona norte de la provincia con otras organizaciones delictivas.
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Según información policial, la banda Gatos Secos se dedica al cometimiento de delitos como sicariato, desaparición de personas, extorsión, robo y microtráfico. Esta opera desde hace 22 años en Manabí, principalmente en cantones como Jama, Pedernales, San Vicente y El Carmen.
En 2016, la Policía anunció la desarticulación de esta estructura, liderada en ese entonces por dos mujeres, en la que también hubo policías vinculados.
Para esa fecha, el Ministerio del Interior aseguró que la organización dominaba en Pedernales.
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En mayo de 2017, la banda delictiva sufrió un nuevo golpe tras la captura de varios de sus integrantes. Hasta ese año, la Policía indicó que la organización tendría a su haber no menos de 50 muertes violentas en la provincia de Manabí.
También se la acusó de incendiar el Comando de Policía de Pedernales, el 25 de noviembre de 2013.
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Este domingo, durante el enfrentamiento donde murió su presunto cabecilla, dos militares resultaron heridos. Ellos fueron trasladados hasta una casa de salud. Uno tiene un disparo en la pierna, y otro, en el brazo.
Las Fuerzas Armadas informaron que al llegar fueron recibidos a balazos por el sujeto. Inmediatamente, ellos repelieron el ataque. (I)