Bíblicamente hablando, son cuatro los jinetes del apocalipsis que resumen todos los males de la humanidad. Pero el Ecuador actual ha superado ese número. Veamos cuáles son:
El calentamiento del mar ecuatorial, que provoca que los peces se vayan al fondo en busca de aguas más frías, significa que la pesca será menos abundante y se encarecerá el producto.
Los deslaves, como los que convirtieron a la capital del Ecuador en una masa de lodo y piedras rodantes que bajaron de quebradas provocando muertos, heridos y destrozos de vivienda y sembríos en áreas circundantes. Situación que llevó al Gobierno a solicitar préstamos y llamar a socorristas internacionales que ayuden junto a los ecuatorianos a paliar la situación.
Publicidad
Los socavones en Zaruma, causados por la explotación ilegal descontrolada que hizo túneles en la zona baja donde se asienta la ciudad, provocando hundimientos y pérdidas de viviendas, etc.
El virus del COVID-19 y sus variantes, causando muchas muertes y contagiados en Ecuador durante los primeros meses de la aparición de la enfermedad en el país, pero gracias a la ayuda internacional y a la compra de millones de vacunas fabricadas por laboratorios del exterior se vencieron en un 95 % los contagios, conforme con lo indicado por la ONU, la OMS, la OPS y el COE nacional, y finalizó la emergencia sanitaria de la pandemia, aunque el virus sigue vivo.
La inseguridad, creada por las bandas internacionales de la droga enviada por carteles mexicanos, colombianos..., para envenenar a nuestra juventud, utilizando grupos criminales nacionales que además contaminan nuestros buques en puertos ecuatorianos para mandar droga al exterior.
Publicidad
El tráfico de armas, por las fronteras del sur y norte de Ecuador con los dos países vecinos. Armas que llegan también por pasos ilegales y a través de ríos orientales ecuatorianos y por mar, en la frontera de la provincia de Esmeraldas con Colombia y también por otros pasos ilegales, son remitidas por grupos terroristas que están ubicados en la frontera colombo-ecuatoriana...
Finalmente, un sector de asambleístas y ciertos resentidos políticos intentan derrocar la democracia.
Publicidad
Hemos superado en Ecuador los cuatro jinetes del apocalipsis bíblico. ¿Quien podrá salvarnos? (O)
Sucre Calderón Calderón, abogado, Guayaquil