Una vez más los animales nos dan buenas lecciones, y lo vemos en la película de Disney que narra la historia de Mufasa, el papá de Simba de la película El Rey León.
Mufasa es un león mezclado con ADN de león africano y asiático. Siendo cachorro él se pierde en la selva y conoce a Taka, otro cachorro de león que es heredero de un linaje real.
Mufasa es un nombre que impone respeto y evoca una sensación de poder, pero también de amor paternal por sus semejantes, que es de lo que deberían estar revestidos los gobernantes.
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Un líder no gobierna desde un pedestal, es el que camina junto con su equipo, llevando a los demás por buen camino, y creando oportunidades para que todos vivan bien, para que todos brillen con luz propia, fomenta la confianza y la camaradería y un sentido de metas y anhelos compartidos.
¿Qué significa hakuna matata? “No hay problemas, no hay preocupaciones”. Es un grito de aliento, de optimismo. Y aunque en verdad a lo largo de la vida hay problemas y preocupaciones, debemos aprender a superarlas y no permitir que nos destruyan.
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En el camino hacia su meta, Mufasa es traicionado por Taka, pero la maldad no triunfó, porque el resto de los animales se unieron, formaron una sola fuerza y pudieron acompañar a Mufasa hasta la meta deseada, pues “la unión hace la fuerza”.
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Mufasa llegó a ser rey de la manada porque desde cachorro luchó y aprendió la importancia del liderazgo, la familia y la sabiduría, para poder vivir en medio de la naturaleza y hacer que todos los que están bajo su mando tengan las mismas oportunidades.
Esta película nos enseña que liderar con amor y empatía fortalece los lazos familiares y crea un ambiente de confianza, paz y respeto, y que la libertad es el bien más preciado, por lo que no debemos permitir que esta nos sea robada. (O)
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Elvira Gabriela Morla Larrea, abogada, Guayaquil
