Actualmente a la crisis generada por la pandemia se suma la delicada situación de los jubilados, al no poder renovar sus préstamos quirografarios en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, ya que al ingresar a la página del IESS en internet y solicitar la renovación, el sistema no lo acepta a pesar que haya pagado el 25% del valor prestado como lo establecen las normas de esa entidad para la novación, y como era costumbre hacerlo.

Los pensionistas necesitamos dichos recursos para la adquisición de medicinas, tratamiento que no los entrega el IESS, como es su compromiso. Además las condiciones de los jubilado se agravan porque en los últimos años el aumento a las pensiones ha sido irrisorio al calcularse a base de la tasa de inflación anual que desde el 2017 al 2020 han sido mínimas por la recesión económica en el país; en el 2018 la inflación fue 0,27%, por lo tanto si la pensión era de $500 le correspondió un aumento de $ 1,35, lo que no es justo; lo procedente es que hagan aumentos para que la mayoría de las pensiones al menos superen al valor de la canasta básica. Resulta indignante el trato que recibe el jubilado después de haber dado sus mayores esfuerzos a las empresas, al país y aportado obligatoriamente al seguro social durante más de 30 años. Este clamor debe considerar la Asamblea Nacional y el Gobierno y de inmediato renovar los préstamos. (O)

Héctor Villón Mateo, economista, jubilado; La Libertad, Santa Elena