El quiteño está irritado, indignado e impotente ante la indolencia e incapacidad de su Municipio, las pocas obras que han ejecutado son incompletas, antitécnicas y de tinte político; el relleno del Trébol (construcción antitécnica), la avenida de la muerte (trazado fuera de norma), Metro de Quito (paralizaciones continuas, barrio Solanda hundiéndose), quebradas del Pichincha, amenaza constante para Quito, etc. El pasado 2 de abril los vecinos del sector de La Gasca volvieron a vivir las apocalípticas horas de la avalancha del 31 de enero de 2022, aunque en menor escala, nuevamente el caudal de la quebrada El Tejado fue el verdugo.

¿Qué provocó el aluvión en La Gasca, norte de Quito?

Después de la desgracia el alcalde visitó el sitio y declaró que la causa es que llovió tanto que rebasó el reservorio. El Municipio construyó en esta quebrada obras paliativas que están lejos de llamarse reservorio. Reservorio es un vaso natural o artificial que almacena agua en invierno para ser distribuida en verano, cuyo caudal es regulado por estructuras hidráulicas adheridas como una represa, desagüe de fondo y vertedero de excesos, ubicadas y dimensionadas en función de la topografía del vaso e hidrología de la cuenca, de tal manera que es difícil que el agua desborde. El control es tan estricto que apenas el uno por mil de las presas en el mundo han colapsado por desborde. El volumen del vaso es calculado en función de la máxima crecida y los sedimentos que trae el río, que a su vez dependen de la intensidad de las lluvias en la cuenca (hidrología). El vaso que habla el alcalde es artificial, cuyo volumen parece no cumplir con los requisitos mencionados, se dificulta más cuando se trata de un río de montaña que acarrea gran cantidad de sedimentos y rocas. Lo más grave es que el vaso parece no disponer de las obras hidráulicas de regulación, por lo que no funciona por falta de mantenimiento. En fin, el vaso de la quebrada El Tejado parece no tener obras hidráulicas de regulación, sumado a un mantenimiento insuficiente, es la causa para que suceda lo que sucedió en La Gasca y si no ponen medidas correctivas seguirá sucediendo. Las lluvias no son las culpables, sino la negligencia e incapacidad del Municipio. (O)

Marco Antonio Zurita Ríos, Quito