Tuvimos un Gobierno electo democráticamente para que esté en el poder por cuatro años, en el cual pusimos muchas esperanzas de mejores días, pero fue una terrible desilusión. Sin embargo, no ha sido el primero y parece que no será el último que nos defraude. Gracias a la feroz oposición de una Asamblea con un porcentaje de aceptación casi nulo, en la cual sigue aún predominando un bloque perteneciente al partido causante de la más horrorosa historia de corrupción del Ecuador, el Gobierno acortó su periodo a dos años y nos vimos forzados a nuevas elecciones. Y ahora estamos encarando el mismo escenario de inestabilidad política gracias nuevamente a ese grupo desestabilizador que trabaja no para mejorar nuestro sistema legislativo, sino en pro de la delincuencia organizada. Tal es así que se oponen al incremento de las penas a criminales. Tal es así que muchos convictos están siendo ahora exonerados de juicios políticos y en otras instancias hasta se saltan las reglas del juego a su conveniencia, archivándolos para iniciar uno contra quien representa una piedra en el zapato. ¿Qué tiempo les queda para ocuparse de los verdaderos problemas del país si su tiempo lo ocupan en salvar a la delincuencia organizada? Consideran su curul en la Asamblea como su licencia para hacer y deshacer a su antojo sin ética ni moral, atropellando a la decencia apoyados por sus asambleístas cómplices, y la ciudadanía mira perpleja y sin poder hacer nada.

Asamblea Nacional aprueba incremento de penas en trece delitos y simplifica la extinción de dominio en delitos contra la administración pública

¿En qué nos hemos beneficiado con un Gobierno interino si los mismos farsantes fueron nuevamente elegidos y siguen haciendo de las suyas en la Asamblea? Vendrá un nuevo Gobierno y la situación no cambiará mientras este grupo continúe. Seguir con ellos en la Asamblea significa seguir con la delincuencia organizada enquistada en el sistema legislativo trabajando a favor de los delincuentes y, lo peor de todo, con nuestra plata. (O)

Nelly Mercedes Lozada García, Guayaquil