Publicidad
La pieza estaba calcinada y cubierta de tejido de fibra de carbono.
El satélite ERS-2 fue lanzado en abril de 1995 desde el Centro Espacial Guayana de la ESA cerca de Kourou, Guayana Francesa,
Institutos y expertos presumen que se trataba de basura espacial, pero no descartan que era un meteorito por su forma
El posible campo de escombros incluye Estados Unidos, India, Australia, África, Brasil y el sudeste asiático, según The Aerospace Corporation.
Aunque es un evento que se estima sucederá mañana, pasarán semanas, incluso meses, para confirmar el impacto a través de imágenes de satélite.
El propulsor se lanzó desde Florida en febrero de 2015 como parte de la misión de un satélite meteorológico espacial.
La compañía insistió en que representan “cero riesgo de colisión” con otros satélites y que están diseñados para desintegrarse conforme reingresan.
Pekín indica que el incidente fue “extremadamente peligroso”.
En la actualidad, a una altitud menor o igual a 402 kilómetros orbitan más de 2500 objetos de un tamaño superior a 10 centímetros.
El número de desechos, su masa combinada y el área total que ocupan ha crecido sin parar desde el comienzo de la era espacial.
Las partes puede caer en la franja comprendida entre las latitudes 41 del hemisferio Norte y Sur, lo que incluye por ejemplo buena parte de América Latina.
EE. UU. indica que el cohete Long March 5B puede caer en la superficie en algún momento entre el sábado y domingo.
El róver es visible en las imágenes, al igual que la basura que dejó caer mientras bajaba a su lugar de aterrizaje.
Los satélites de madera se quemarían sin liberar sustancias nocivas a la atmósfera o llover escombros en el suelo cuando regresen a la Tierra.
Según un especialista el meteorito encontrado no cuesta los dos millones de dólares que asegura Ebay, sino que probablemente vale algunos cientos de miles.
Expertos advierten sobre posibles colisiones de satélites si no se empieza a tratar el problema de los desechos espaciales.
La Tierra se ha encontrado con el objeto durante sus respectivas traslaciones en 1984 y 2002.
La Luna tiene cientos de lugares con rastros humanos, según For All Moonkind, que contabiliza al menos 167 toneladas de material en el satélite terrestre.
La Sociedad de Meteoritos de Estados Unidos reportó más de una veintena de avistamientos desde Jacksonville hasta Key West.
Los europeos y los estadounidenses trabajan en conceptos similares, pero la idea de limpiar la órbita terrestre sigue siendo muy experimental.