Un discurso ameno y a ratos jocoso caracterizó el miércoles la incorporación de Bruno Sáenz Andrade como miembro correspondiente de la Academia Ecuatoriana de la Lengua. El poeta, ensayista y dramaturgo cautivó a la audiencia que al final agradeció su intervención con aplausos, abrazos y felicitaciones.

Sáenz, nacido en 1944, recibió ese reconocimiento de manos de la directora de la Academia, Susana Cordero. Sus méritos literarios fueron la catapulta para ingresar a la noble institución.

Sáenz ha escrito poesía, cuento, ensayo y teatro y entre sus obras más destacadas están El aprendiz y la palabra, Relatos del aprendiz, El caminante mira como pasa el camino y Crónicas de los Incas sin Incario.

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Durante su presentación en el Centro Cultural Benjamín Carrión, se indicó que él empezó con su tarea literaria oficialmente en 1963, pero la práctica comenzó antes. Muchos de sus poemas, incluso, se tradujeron al portugués, inglés, francés e italiano.

Su discurso se tituló ‘Cartas de Julio Zaldumbide y Juan León Mera en las memorias de la Academia’.