Cada pasillo, cada escalera, cada habitación de la Casa Cino Fabiani (en el barrio Las Peñas), servirá de escenario para la puesta de Rabia, obra con la que el cineasta ecuatoriano Sebastián Cordero se estrenará como director teatral. “A mí siempre me ha interesado mucho el teatro; sí, soy alguien que disfruta del teatro; que leo también teatro, me gusta verlo en vivo y sí, siento que es una influencia interesante para mí y desde adolescente sí tenía el sueño de algún día también hacer una obra de teatro”, cuenta el realizador que alista su primer documental largo y una película que se rodará a fines de año en Cuenca.