La primera respuesta parecería obvia: Argentina, por ser la vigente campeona del mundo. Sin embargo, no estamos mirando para atrás sino hacia adelante. En dos meses llegan la Eurocopa y la Copa América; y, en apenas dos años, el Mundial. Es bueno hablar de potencialidades y posibilidades. Y ha pasado un año y medio desde el triunfo de los tricampeones; en fútbol no es poco, pueden cambiar cosas. Ya vemos como Erling Haaland pasó en solo unos meses de ser considerado un fenómeno a generar enormes dudas sobre su real envergadura futbolística. ¿Es un monstruo del gol o una estrella fugaz…? Roy Keane lo definió, acaso exageradamente, como “un jugador de cuarta”.