Argentina se impuso por la mínima ante Paraguay, pero el resultado quedó en un segundo plano. Lionel Messi volvía a los terrenos de juego tras casi un mes parado donde apenas pudo disfrutar de media hora de juego con el Inter Miami.

Superada ya la lesión del diez, Lionel Scaloni le concedió un par de minutos ante los paraguayos para volver a tener rodaje en competición.

En algo más de 40 minutos, la Pulga tuvo tiempo para mandar un tiro libre a la madera, pero los focos también se fijaron en un momento clave del partido, una agresión a la estrella que incendió a toda Argentina, publica diario AS.

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A cinco minutos del final y tras una acción fortuita, Messi tiene unas palabras con Antonio Sanabria, delantero paraguayo del Torino de la Serie A. El argentino le increpa unas cosas a su homónimo, recibiendo un escupitajo al darse la vuelta que el propio Messi no llegaría a ver hasta acabado el partido.

“Me lo comentaron mis compañeros en el vestuario que me habían escupido. No sé quién es el chico este. No lo vi. Tampoco quiero darle importancia, sino ahora sale en todos lados. Es peor, se hace conocido”, aseguraba la ‘Pulga. “Es mejor dejar el tema así”.

Fuera del tema extradeportivo, el diez volvía a sentirse futbolista tras unas molestias que terminaron por condenar al Inter Miami para la clasificación de la postemporada. Ahora, la recuperación de Messi es una cuestión de estado tanto en Florida como en la AFA.

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“Estoy contento por volver a jugar y sumar minutos. Siempre es difícil entrar y más en un partido tan trabado. Lo importante es que ganamos y por momentos se jugó muy bien, especialmente en el primer tiempo”, manifestó.

“Hubo varias situaciones y ellos solo tuvieron una sola”, declaraba Messi para luego añadir: “El cuerpo técnico tiene mucho que ver en que sigamos de al misma manera a pesar de haber sido campeones del mundo y también tiene que ver la mentalidad que tiene este grupo”. (D)