Pese a haber iniciado la jornada con una victoria, la ecuatoriana Luisa Valverde está virtualmente eliminada de los 57 kilogramos de lucha femenina de los Juegos Olímpicos tras perder en los cuartos de final ante la japonesa Tsugumi Sakurai.
La tricolor ahora depende de lo que realice la asiática en el resto de la competencia para volver a pelear: si Sakurai accede a la final, la babahoyense disputará el repechaje para disputar medalla de bronce.
Este combate no fue nada sencillo para la ecuatoriana ya que fue dominada por su rival de inicio a fin. El marcador terminó 11 a 0 a favor de Tsugumi, que desde que comenzó a puntuar, decayó el rendimiento de la sudamericana.
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“Esperamos ahora que la japonesa pueda ganar y avance y poder así yo entrar a lo que es el repechaje”, explicó Valverde para RTS.
Sobre su rival, indicó: “Gracias a Dios he sido también la única ecuatoriana en ganarle en Japón, en un torneo en Bulgaria. El nivel técnico y táctico es muy alto, así que para mí fue grandioso luchar contra Sakurai”.
Con la ventaja, Valverde mantuvo el control sobre la lona para luego controlarla a la europea y llevarla con la espalda plana para asegurar una meteórica victoria en el primer periodo de la lucha. apoyando, que vamos con todo”, finalizó la tricolor.
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Una victoria y una derrota en París
Tras la derrota, Luisa Valverde aún tiene la posibilidad de sumar una medalla para la delegación ecuatoriana en la lucha olímpica de París 2024. Para esto, la japonesa Tsugumi Sakurai debe avanzar a la final de la competencia y así la tricolor disputaría el repechaje por el bronce.
De esta forma, Valverde finaliza esta fecha con una victoria y una pelea perdida. En los octavos de final, la luchadora se impuso 6-0 a la italiana Aurora Russo para confirmar su clasificación a los cuartos de su categoría.
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La peleadora oriunda de Babahoyo tuvo un gran inicio ante la europea al sumar 4 puntos luego de conseguir un derribo en los primeros dos minutos. Y siguió atacando.
Con la ventaja, Valverde mantuvo el control sobre la lona para luego controlarla a la europea y llevarla con la espalda plana para asegurar una meteórica victoria en el primer periodo de la lucha. (D)
