Siempre ha sido frontal. Con ella no hay medias tintas. Su voz, en medio de un escenario o incluso fuera de este, capta la atención de quien la escuche. La guayaquileña Patricia González convirtió al bolero en su marca personal.

Ha cantado junto a grandes colegas artistas como Alberto Cortez, Chabuca Granda y Armando Manzanero que en el camino se convirtieron en sus amigos y con quienes guarda innumerables vivencias. La intérprete de La Torre,  el próximo año llega a sus cinco décadas de trayectoria musical y con total certeza, asegura, es también el tiempo apropiado para despedirse de su público.

En marzo comenzó con una serie de presentaciones que se mantendrán hasta noviembre de este año en Microteatro Guayaquil, en La Bota, y en la que cuenta con el acompañamiento musical de Marcel Ferrer y Alejandro Cañote, en la que canta y toca junto con ellos la guitarra, en shows más íntimos para sentir más cerca a su fiel audiencia.

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Patricia conversa con este Diario sobre sus planes para el 2020 y sus aspiraciones al término de su carrera.

¿Por qué decide retirarse de la música?

Porque quiero una cosa: yo quiero atrapar al ocaso, no que el ocaso me atrape a mí, que lastimosamente no todos los artistas tenemos esa visión. A mí no me gustaría, no tengo nada en contra de la edad, no tengo nada en contra de la gente que quiere seguir trabajando, pero a mí no me gustaría salir, sino como soy. No es que creo que voy a tener algo, sino que prefiero retirarme como soy, no retirarme y que digan que se retira porque está enferma, porque no puede cantar, porque perdió la voz.

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Simplemente es una decisión (el retiro de los escenarios) que creo que debo tomar, porque es lo correcto y hay que darle paso a otra gente que ya tienen mucha trayectoria atrás”, Patricia González cantante.

¿Y si su público la sigue buscando?

Bueno, ya me tuvo muchos años y tiene que saber comprender que la vida no es solamente un escenario. A mí me encantaría, pero no creo eso que la gente dice: yo me quiero morir cantando. Yo no me quiero morir cantando.

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¿Cómo se quiere morir?

Tranquila, con una muerte muy rápida, no quisiera ni estar enferma, ni un accidente ni nada violento, una forma tranquila en mi casa, con mi familia que es lo que más adoro.

¿Qué le falta por hacer en escena o ya hizo todo lo que quiso?

Quizás me falten algunas cosas, nunca se llega a hacer lo que uno tiene pensado, ha anhelado o quiere hacer. Pero yo he tenido una vida artística –gracias a Dios– con mucha felicidad, con muchos artistas a mi lado como Manzanero, Alberto Cortez, Joan Manuel Serrat, Carlos Vives.

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¿Cantó con todos lo que quiso?

Canté con todos ellos. Yo creo que yo con lo que he cantado estoy feliz, nunca pude cantar con Lucho Gatica siendo mi gran amigo por razones varias pero Lucho era una persona maravillosa. Canté con Roberto Ledesma, con Chabuca Granda, con Nelson Ned pero yo he tenido gracias a Dios he tenido la suerte de ser cantante y al mismo tiempo conocer a los autores de las canciones que eso es importantísimo. Cantaba con  Chabuca Grande que fue mi gran amiga y han pasado  muchos años y todavía es una nostalgia que siento por ella. Ella fue la primera persona que me empujó a un escenario después fue Armando.

¿Cómo será esta gran despedida?

Yo no le digo gran despedida, va a ser una despedida. Yo me voy a despedir en la forma que sé, que es con música. Quiero hacer dos o tres conciertos, pero con los artistas que yo creo que me quieren, creo que merecen estar a mi lado y yo al lado de ellos y si alguno se me escapa no es por nada sino porque uno no puede cumplir con todas las personas en la vida.

¿Ha pensado en algún disco de despedida?

No lo sé aún, estamos elaborando esto con la persona que maneja estas situaciones pero  me gustaría hacer una despedida, nada pomposo sino una despedida que sea más sentimental y recordatoria pero con música.

¿No va a extrañar los escenarios?

Yo creo que una dice que no los extraña pero al momento de la hora, cuando llega el momento yo creo que a todos nos pasaría o nos pasa lo mismo, los que nos queremos retirar, que extrañamos el escenario pero todo tiene su momento como dice la canción y, todo tiene su final y hay que saber aceptar el final y no le digo que me retiro porque no tengo voz ni porque ando ilimitada ni nada. Simplemente es una decisión que creo que debo tomar porque es lo correcto y hay que darle paso a otra gente que ya tienen mucha trayectoria atrás.

¿Quiénes serían referentes del bolero en el país?

Boleristas muchos no conozco, pero entre las voces nuevas le digo sinceramente Luz Pinos me encanta; tuve el grato momento de conocerla y para mí es una niña que tiene una voz maravillosa. Me gustaría estar con Pamela Cortés, que la conozco desde muy niña y con otras personas que quiero ver como Mirella Cesa para poder estar rodeada de gente joven, pero talentosa.

Después del retiro musical, ¿qué viene?

Bueno yo tengo una casa en la playa que la disfruto todo el tiempo, yo amo  la playa y me gustaría irme a vivir a la playa o irme a un sitio como decirle España quedarme por allá seis meses, ocho  meses regresar, estar en otra parte porque a mí me gusta mucho viajar pero estar relajada.

Y al nuevo talento que le recomienda Patricia…

Que tenga perseverancia, que tenga ganas, a mí no me ayudó absolutamente nadie, digo Chabuca Grande me dio el empujón, Armando Manzanero también me lo dio y yo estoy agradecida y dijeron aquí esta Patricia González pero cuando yo comencé mi carrera profesional yo tuve que ir a un banco a prestar plata y me la prestaron para mandar  hacer mis discos.

¿Si tuviera que corregir algún momento de su carrera?

Nada yo estoy  feliz y he sido brava y yo no me arrepiento de nada. Que si  dice la gente que tú eres brava con el público, mal genio, yo hago con el público lo que el público cuando hace algo se lo merece hacen bulla y les digo por favor cállense,

¿Patricia sí ha sido profeta en su tierra?

Al principio fue un poco duro por eso es que yo me fui a Colombia y yo llegué internacionalmente a Ecuador porque mis discos venían de Colombia. Hay gente que creía que yo era colombiana, pero me costó como le ha costado a todas las personas que nos metemos en este medio, hay que saber trabajar, hay que saber tener bastante temperamento, hay que tener bastantes ganas. Me costó, pero lo logré, soy profeta en mi tierra. (E)