El pasado 8 de julio la artista Naya Rivera, a quien se la conoció por su papel de Santana en la serie juvenil Glee, murió ahogada mientras daba un paseo con su pequeño hijo de cuatro años en el lago Piru. La autopsia completa ha salido a la luz y revela detalles importantes de la vida de Rivera.

La muerte de la actriz se confirmó el 13 de julio, luego de que se iniciaran las operaciones de búsqueda y rescate respectivas. La suposición original fue que Josey (hijo de Rivera) y ella fueron a nadar al lago, el niño subió de nuevo al bote en el que se encontraban pero Naya Rivera no.

De acuerdo a la revista People Josey dijo a los investigadores que su mamá había contado “1, 2, 3” y que luego de eso se lanzaron al agua. Luego Rivera le habría dicho que regrese al bote y lo ayudó a subir.

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El informe de autopsia decía: "La fallecida tenía vértigo hasta el punto de vomitar, pero aprendió a controlar los síntomas con antihistamínicos".

La salud de Rivera se encontraba perfecta antes de su fallecimiento de modo que fue categorizado como un accidente .

También se reveló en el informe de toxicología que tenía niveles bajos de anfetamina (Adderall, Dexedrine), diazepam, etanol y fentermina (un supresor del apetito) en su sistema. El nivel de alcohol era de 0,016 por lo que se presume que bebió un poco en el bote. (I)