La salud de la cantante Fresia Saavedra se encuentra en grave peligro, así lo confirmó en una conversación con este Diario su hija, la también artista Hilda Murillo.

De acuerdo con Murillo, el pasado jueves 20 de junio Saavedra sufrió una caída que, sumando a las complicaciones por la diabetes y la cirrosis que sufre, la llevó a pasar intubada hasta el día de hoy, viernes 12 de julio. Se encuentra en la unidad de cuidados intensivos en una clínica de Guayaquil.

Fresia Saavedra: artistas se unen en gala solidaria para recaudar fondos por sus gastos médicos

“Todo empezó con la caída, donde se desgarró los brazos, las piernas... Se la llevó a emergencias y al día siguiente quedó sin el habla, con la mirada perdida y sin reconocer a nadie. Poco después de ese momento ella ya no despertó”, detalló la intérprete conocida como la Triunfadora de América.

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“Está más o menos en un estado de coma, eso nos dijo el doctor. Estamos esperando que el Señor Todopoderoso decida si se queda o se la lleva. Esperamos ver cómo reacciona con los medicamentos, pero ella ahorita ya no reacciona”, indicó sobre su madre, quien -en cambio- es conocida como la Señora del pasillo.

A sus 90 años, Fresia Saavedra aún se mantenía en los escenarios

“Ella es una mujer pública, por eso no puedo dejar pasar por alto lo que significa el legado maravilloso que dejará a su pueblo, sus fanáticos, a la gente que la ha respetado y querido. A sus 90 años todavía se mantenía en los escenarios“, contó la única hija de la representante del pasillo ecuatoriano.

“Generalmente cuando una persona llega a una cierta edad se la olvida, pero cuando hizo en Galápagos, durante el mes de febrero, su más reciente concierto, fue recibida con los brazos abiertos entre jóvenes y adultos”, resaltó Murillo, quien compartió como se prepara para el último destino de su progenitora.

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“Cómo quisiera tener voz para decir que no importa cómo quede mi madre, con tal de tenerla a lado mío, pero también sería egoísta que ella quedara viva, pero sin su voz. Yo así no la quiero tener y ella tampoco quisiera estar así. Sé que su respuesta sería ‘por qué no me dejaste morir, no puedo cantar, no puedo hablar, entonces para qué existo, para qué estoy aquí'. Por eso estoy aceptando los designios de Dios. Que Él decida lo mejor para que ella ya no sufra más”, confesó Murillo, de 72 años.

La guayaquileña se siente apenada por todos los que conocieron a su madre y también por los alumnos de ella en la Escuela del Museo de la Música Julio Jaramillo. “Ha sido maestra por 16 años, entregando todo su conocimiento a estos chicos jóvenes para que nuestra música tenga la mejor condición, la mejor interpretación como ella lo hacía. Esa siempre ha sido su misión, entregar todo lo que ella sabe para todos los que lo necesitan”, enfatizó.

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Mañana sábado 13 de julio se realizará una gala solidaria con el fin de recaudar fondos para costear los tratamientos médicos que necesita de urgencia. El evento se desarrollará en el Centro de Eventos Costanera, ubicado en Urdesa. (I)