No son buenos tiempos en la relación entre el rey Felipe y la reina Letizia. La pareja atraviesa una de las peores crisis vividas a lo largo de los casi 20 años que llevan juntos.

La última chispa se encendió por la decisión sobre el futuro de la princesa Leonor. Y es que el futuro educacional de la futura reina de España dejará de estar en manos de sus padres el próximo mes de octubre, cuando la joven cumpla 18 años. A partir de entonces será el Gobierno quien decida los pasos a seguir por la princesa, así lo informó la Revista Lecturas.

Las diferencias entre los reyes Letizia y Felipe por el futuro de su hija Leonor

Siguiendo los pasos de los anteriores Jefes de Estado, la princesa Leonor pasará los próximos tres años recibiendo formación militar en cuarteles de Zaragoza, Pontevedra y Murcia.

Publicidad

Se busca príncipe para Leonor de Borbón: estos son los herederos de las familias reales europeas que podrían ser un buen partido para la hija de la reina Letizia

Este es un futuro con el que comulga el rey Felipe VI. Sin embargo, Letizia no lo ve con buenos ojos. Y las diferencias derivaron en una grave crisis de pareja. Discusiones, gritos y portazos es lo que se vive en Zarzuela en las últimas semanas. Así lo explica Pilar Eyre, periodista especializada en la casa real, en su blog de la revista Lecturas.

Letizia no apoya la militarización de su primogénita. No quería que Leonor ingresara en el ejército, ya que prefería entrar a la Universidad, o dedicar un año a modo de “gap year”, un año donde los jóvenes viajan, prueban distintas disciplinas, toman contacto con el mundo adulto y eligen aquella carrera profesional que realmente les interesa.

“Tiempos duros para Letizia y para su matrimonio. Hasta ahora ella ha tenido la iniciativa en la formación de Leonor. Pero a partir de los 18 años Leonor ya no pertenece a su familia, pertenece al Estado, ya no es su madre la que guía sus pasos, sino el gobierno”, dice la periodista.

Publicidad

La comunicadora social refiere el papel que la ha tocado al gobernante español para apaciguar los ánimos de la reina. “Felipe ha sido el encargado de convencerla y esto ha generado entre ambos mucha tensión, días sin hablarse y también portazos y gritos que ha oído perfectamente el personal de servicio, poco acostumbrados a que el rey alce la voz”, escribió Pilar Eyre. (E)

Te recomendamos estas noticias