Nota del Editor: Estimado lector esta información es parte de nuestro contenido premium preparado al finalizar el 2023. En su contenido encontrará uno de los hechos destacados de este año y por ello el acceso lo hemos dejado abierto.


Aunque el rompecabezas de la administración municipal empezó armado en enero de 2023, para mayo las piezas se separaron.

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Las bases de ese escenario al que estaba acostumbrado la ciudad, y que se mantenía desde hace 30 años, se movieron con el cambio de administración derivado de los resultados obtenidos en las elecciones seccionales de febrero.

Los socialcristianos perdieron la Alcaldía después de tres décadas y entró Aquiles Alvarez, cuadro de la Revolución Ciudadana (RC).

Cynthia Viteri fue la última autoridad socialcristiana en el Sillón de Olmedo luego de las administraciones de Jaime Nebot y León Febres-Cordero.

Los contratos en el primer semestre de la Alcaldía de Aquiles Alvarez llegan a $ 65 millones

Alvarez comenzó su administración con acciones que buscaban ‘ordenar la casa’. Al estilo de León Febres-Cordero, el nuevo alcalde realizó tres rendiciones de cuentas de cómo se halló el municipio.

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Desde la visión de Alvarez, se ajustaron con un presupuesto sincerado de $ 656 millones para 2023 (antes $ 755 millones) y una reorganización de las instancias municipales.

Se abolió, casi en su totalidad, la figura de fundaciones y se pasó a empresas públicas. Se retomaron las obras inconclusas y se terminaron unilateralmente contratos.

En el segundo semestre, en el que la Alcaldía comprometió recursos por un total de $ 65 millones en diferentes rubros, 33 ordenanzas y reformas a normativas vigentes se aprobaron, enfocadas en varios aspectos.

Una nueva distribución de la ciudad, nuevos avalúos, eliminación y reducción de multas, inclusión de los comerciantes autónomos mediante ferias, regulación de vallas y de edificaciones tuvieron luz verde desde el Concejo Municipal, que ahora tiene gran parte de ediles de Revolución Ciudadana; escenario diferente al de inicio de año en el que la mayoría era apadrinada por el socialcristianismo.

También dentro de este gran número están los cuerpos legales que sustentan los cambios de los organismos municipales.

Nueva distribución de la ciudad y nueva cara de espacios públicos

La administración de Aquiles Alvarez buscó solventar debilidades que, desde su perspectiva, eran una deuda histórica para la ciudad.

La planificación y redistribución de Guayaquil por 19 áreas de gestión administrativa (AGA) fue una de las primeras ordenanzas que se aprobó desde el cuerpo edilicio y que tuvo repercusión, incluso, en la elaboración del presupuesto para 2024 que será de $ 685 millones y que tiene un componente fuerte para obra pública.

Esta normativa, que fue presentada en junio por la Dirección de Urbanismo, Planificación y Ordenamiento Territorial (Dupot), pretende juntar a barrios que guarden afinidad entre sí según la localización geográfica y homogeneidad de su población, provisión de equipamiento, entre otros componentes.

Corredores navideños que funcionan en cuatro calles de Guayaquil generan $ 55.000 a diario

Además, actualizará el plan de uso y gestión de suelo y el plan de desarrollo y ordenamiento territorial y permitirá distribuir recursos de forma equitativa.

Para Ricardo Pozo, catedrático y miembro del Observatorio Urbano y Territorial de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, esta sí fue una prioridad que debía darse lo más pronto, sobre todo para dejar por sentado el cambio de administración y los proyectos que se anclarán en esta normativa.

“Salimos de un modelo para entrar a otro y era necesario el cambio de acciones en la ciudad”, señala el docente, quien una vez más resaltó que esta fue una medida técnica que estuvo carente de participación de miembros de la sociedad civil.

En cuatro calles del centro de Guayaquil se ubican desde inicios de diciembre 900 comerciantes autónomos para ofrecer sus productos. Foto: El Universo

En esa línea de ejecutar acciones para ordenar la ciudad y también limar asperezas con sectores que históricamente han tenido diferencias con el cabildo, se implementaron en 2023 siete ferias ciudadanas que recorrieron diferentes puntos de la ciudad con la participación de comerciantes autónomos (informales). Además, se avanzó con el censo para ordenarlos.

De este acercamiento con el comercio en este año también nació la ampliación de la Bahía y la implementación de un corredor comercial (edición Navidad), que ahora apunta a convertirse en una acción permanente para dinamizar la economía de este sector que se toma calles del casco central y para darle un uso ordenado al espacio público.

El catedrático señala que es necesario, antes de hacer cualquier proyecto en el centro, tener un plan maestro para ese sector.

De esta manera, se pueden determinar prioridades y acuñar una estrategia para repoblar esta zona de la ciudad que se volcó a lo comercial y en la que prima el congestionamiento vehicular, polución, contaminación por ruido, entre otros factores.

“Si estas acciones han sido enfocadas y enrumbadas al tema del ordenamiento territorial que requiere la ciudad, está correcto; pero si son decisiones en función solamente del requerimiento de un grupo y esto implica la colocación de grandes recursos, es un problema porque todo debe responder a una planificación”, analiza Pozo.

En la senda de reactivación de espacios, el cierre y la posterior apertura de la Plaza Guayarte también fue una acción de Alvarez durante 2023.

El área comercial de dicha plaza se cerró el 2 de julio, dentro de las falencias detectadas en ese entonces estuvo el mal estado de la infraestructura y problemas en la parte ambiental, por lo que se sugirió el cierre del lugar.

En octubre este espacio se habilitó, nuevamente al público, pero con la apertura al emprendimiento.

Holbach Muñeton, presidente de la Cámara de Turismo del Guayas, afirma que, a pesar de que hubo críticas sobre si era el tiempo para intervenir este espacio, fue una decisión acertada ya que se deben proliferar los sitios de esparcimiento y de atracción turística en Guayaquil.

“Todo fue acertado porque Guayaquil tiene que apuntar a ser una ciudad en la que la gente se quede, que disfrute de sus espacios, que se apodere de ello, que disfrute de sus plazas y que atraiga a personas”, indica.

Por ello, el anuncio del traspaso de competencia del Gobierno al Municipio para el parque Samanes también representa un desafío a mediano y largo plazo para convertir a la ciudad en punto turístico y familiar, asegura Muñeton.

El traspaso del parque Samanes al Municipio tiene plazos: estas son las condiciones, tiempos y lo que ocurrirá con los trabajadores

El nacimiento de la Empresa Pública de Seguridad

Parte de la esencia de Aquiles Alvarez ha sido enfocarse en la reorganización. Por ello, no fue nuevo que apenas asumiera el mando cambiara el modelo de ciertas instancias municipales.

Se pasó de la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil a la Empresa Pública de Seguridad que cobijó al Cuerpo de Agentes de Control Metropolitano y a la Dirección de Gestión de Riesgos.

La Empresa Pública Municipal de Turismo dejó a otra dirección las actividades cívicas que eran parte de esta instancia en la administración anterior y la Fundación Siglo XXI también pasó a ser empresa pública.

¿Cómo queda distribuido el presupuesto municipal de Guayaquil de $ 685 millones para el 2024?

Desde la visión de Manuel Macías, director del Observatorio de Políticas Públicas, este cambio fue parte también de la especie de “estabilización” de la situación municipal para trabajar en la planificación de los años venideros.

Algo que se debía hacer dado el cambio de autoridades y el quiebre de un modelo que ha estado instaurado por años en el cabildo.

También para reforzar la institucionalidad de un pieza clave en el trabajo por la seguridad ciudadana y el contexto de violencia que afecta al país y a la ciudad.

“Se hizo bastante trabajo de escritorio, por así decirlo, fue organizar y trazar hoja de ruta para llegar a una ejecución más adelante. (...) Habrá que ver en 2024 si esas acciones tomadas en este año se consolidan e institucionalizan y ver hasta dónde se alarga el tema de ‘reorganizar la casa’”, afirma.

En este año, el Municipio implementó las sesiones itinerantes del Concejo en diferentes sectores de la ciudad. Fotos: César Muñoz/API Foto: API

Por ello, asegura, que este trabajo de hormiga para sentar las bases de la administración se pudiera extender hasta el primer trimestre de 2024 o hasta mayor, que se cumple el primer año de gestión, pero no más de ello.

El director del Observatorio de Políticas Públicas de Guayaquil afirma que los retos del año entrante para la administración se deberán enfocar en el trabajo en territorio y en fortalecer la participación ciudadana, que en este año se ha visto plasmada medianamente a través de las sesiones del cuerpo edilicio que recorren sectores populares. En este año se realizaron cuatro.

“Ya sería darle carne y contenido a la planificación, a lo que se hizo desde adentro. Toda la planificación es importante, pero al final de cuentas es un papel que necesita verse plasmado en proyectos palpables que atiendan las necesidades ciudadanas”, señala Macías. (I)