La imagen imponente de un Batman de ocho metros de altura resalta en la calle Capitán Nájera y la 15, suburbio de Guayaquil. En ese sitio, Adolfo Alvarado -quien ya es reconocido por su habilidad para elaborar monigotes gigantes y que ganó con su creación del Joker el concurso de 2022- se lanzó en este año a crear otro personaje de Ciudad Gótica.

Poco antes de llegar a la calle 15 se observa la estructura del Batman pintada con los colores característicos: gris, negro y amarillo. El cuerpo del personaje es robusto, las piernas y brazos fueron elaborados de forma minuciosa para remarcar los detalles de su musculatura, asimismo en el rostro se puso especial atención en las facciones y en la máscara que le recubre los ojos.

Una réplica gigante de la misteriosa obra Golconda de René Magritte se arma en el suburbio de Guayaquil

Aunque la idea inicial era replicar una escenografía de la saga X-Men, se apostó por consultar a través de redes sociales a quienes disfrutarían de esta muestra artística. Es así que en noviembre de este año se hizo una encuesta en Facebook para decidir el gigante que se elaboraría y que formaría parte de la ruta que se inauguró el viernes 22.

Publicidad

Fue así como Alvarado empezó en ese mes a recoger detalles de las tiras cómicas de Batman y de las películas que han venido de la mano de diferentes directores. Tomó de los filmes la idea del traje y de las tiras cómicas, la forma de la batiseñal y de los edificios en donde reposaría la estructura principal.

El Batman, que es el personaje principal de la escenografía, está armado con una base de varillas, cubierto con espumafón y cartón, y los detalles fueron esculpidos con almidón, harina y papel blanco, encima se colocó resina para proteger la pintura. La técnica de pintado que se usó fue la aerografía y los detalles más pequeños se hicieron con pincel.

Publicidad

En la etapa inicial del armado de la estructura participaron al menos diez personas que se encargaron de soldar las piezas y armar el escenario que también se levantó con hierro forjado.

Publicidad

La batiseñal forma parte de la escenografía del Batman elaborado por Adolfo Alvarado. Foto: Víctor Serrano Foto: El Universo

Al gigante se lo colocó sobre el escenario por partes, primero el tronco con los brazos y la cabeza, y sobre la especie de tarima que se ubicó en la calle se armaron las piernas y demás acompañantes de la escena. Todo este trabajo se inició el 20 de noviembre.

Alvarado no es nuevo en este trabajo, pues desde hace varios años participa con sus creaciones en el concurso de monigotes gigantes.

Publicidad

En 2022, por ejemplo, puso en escena un gran asiento con la figura del Joker en la que primaban los colores brillantes. En ese año ganó.

Para especializarse en la elaboración de estas figuras a gran escala, el artista de 28 años ha recibido cursos de pintura y escultura.

A los 10 años fue cuando tuvo el primer acercamiento con este tipo de obras junto con su abuelo y a los 14 empezó con la elaboración de los gigantes. Se graduó en el colegio de Bellas Artes luego que sus padres observaran la dedicación que tenía hacia la pintura.

Si bien su trabajo no es de escultor o pintor, esta es una de sus más grandes pasiones. Llegado diciembre dedica quince y más horas al día a la elaboración de los monigotes, su meta es siempre plasmar ideas grandes y que provoquen impacto.

Fondo de Bikini con Bob Esponja, Calamardo y otros cinco personajes de serie se elaboran para exposición de años viejos gigantes en el suburbio

En este año, Alvarado ideó el personaje de Batman con luces de diferentes colores y algunas que se proyectan hacia las paredes con el sello tradicional de la caricatura. Los efectos de humo también se consideraron para darle más realismo a la obra. El costo total del muñeco supera los $ 1.700.

Uno de los factores que diferencian el trabajo de Alvarado es que, además de tomar inspiración para la estructura y la escenografía que acompañarán al personaje principal, analiza cuál es su perfil psicológico.

En este año, el aspecto del Batman recoge, con las facciones del rostro, el misterio y la seriedad. Incluso se optó por mantener una mirada fija y fuerte para que se denote la imponencia. Citó que el año anterior con el Joker se trató de demostrar que el personaje tenía una vida desordenada y descomplicada, por ello optaron por un sillón y el protagonista sentado en él de forma relajada.

“Lo que siempre queremos lograr es que la gente sienta que está dentro de una película, de una tira cómica. Que se sienta que está en el mundo del personaje, que se identifique”, relató. (I)