Al permanecer más tiempo en casa debido a la pandemia por coronavirus, hay quienes han quitado de su rutina de cuidado personal el uso de protector solar, un error que puede causarnos problemas en la piel a largo plazo, principalmente en el rostro.

Las pantallas de muchos de los dispositivos que utilizamos a diario (celulares, computadoras, tablets, etc) emiten la denominada luz azul (o radiación HEV por las siglas en inglés de High Energy Visible) que influye sobre la aparición de manchas y acelera el fotoenvejecimiento, asegura la dermatóloga María Cecilia Briones.

Ya sea por el teletrabajo, por clases virtuales o reuniones online, muchos han incrementado sus horas frente a las pantallas, sin percatarse de que esto tendrá consecuencias en su piel si no se aplica la protección adecuada.

Publicidad

"Estamos usando desde hace varios años computadoras, los jóvenes están pendientes del celular, de los juegos tanto en la televisión como en las tablets y todos estos equipos emiten luz azul, provocando que aparezcan las pigmentaciones. Sabemos que la radiación ultravioleta, la luz solar, generará un daño a nivel de la piel y este daño es acumulativo. A mediano o largo plazo puede causarnos fotoenvejecimiento, aparición de arrugas".

En muchos casos, creemos que únicamente la luz solar puede afectarnos, pero existen vías artificiales de radiación ultravioleta que, sin los cuidados necesarios, también dañan nuestra en la piel.

"Muchos no tomamos en cuenta las fuentes artificiales de radiación ultravioleta, como son los famosos focos ahorradores, las lámparas halógenas que están siempre las oficinas para alumbrar los pasillos. También hay que tomar en cuenta que la luz que atraviesa por nuestras ventanas, recordar que el sol también puede quemar de manera indirecta por el reflejo y sobre todo dependiendo de la superficie donde caiga, entonces vamos a tener la acción o la llegada a nuestra piel de la radiación ultravioleta de manera artificial".

Publicidad

¿Cómo y cada cuánto aplicar protector solar?

Debido a esto, la especialista recomienda el uso de protector solar, aunque permanezcamos en casa. Señala que lo ideal es usar sustancias que sean pantallas solares, que funcionan como una pared entre la radiación ultravioleta y la piel. Para que cumplan con esta función debemos verificar que contengan ingredientes específicos como son el óxido de zinc o el dióxido de titanio, ambos actúan eficazmente como bloqueadores, aunque muchos de ellos presentan una textura viscosa, en la actualidad hay otros más ligeros y en diferentes tonalidades.

Briones señala que debe usarse un factor de protección solar (FSP) superior a 30. La cantidad debe ser similar a la medida de una cucharadita de té y debe distribuirse en el rostro y el cuello. Esta aplicación se repite cada tres o cuatro horas para mantener activa la protección.

Publicidad

Estas recomendaciones deben tomarse en cuenta también en niños, adolescente y jóvenes que actualmente reciben clases virtuales debido a la pandemia. En el caso de los pequeños, debido a que su piel es más delicada, debe adquirirse uno especialmente para ellos.

Otras recomendaciones

La especialista señala que, a más del uso de protector solar, para mantener una piel sana también debemos hidratarla adecuadamente, es decir, con productos que vayan acorde a nuestro tipo de piel. Si tenemos el cutis graso es preferible usar un gel y, si es seco, lo ideal es usar una crema.

También podemos complementar esto tomando antioxidantes, indica Briones. "El polypodium leucotomos, que se trata de una planta, es un excelente antioxidante y puede actuar como un bloqueador solar oral, es decir, actúa de manera sinergista con los bloqueadores tópicos, además ayuda mucho en la respuesta inmunológica". (I)