La Costa ecuatoriana, sobre todo Guayaquil, atraviesa días de intensa radiación solar. La temperatura en el Puerto Principal ha alcanzado los 36 grados centígrados, una realidad que no solo ha causado malestar en los ciudadanos, sino que también afecta a la vegetación o las plantas de interior, pues la humedad del clima es capaz de generarles hongos y, posteriormente, su pudrición total.