Voy a casarme en diciembre, y mi novia tiene muchas deudas con dos bancos y está comprometido su historial crediticio. Ella era socia de una empresa que quebró, y el dueño, que es su amigo, aún no termina de pagar. Los bancos la llaman continuamente a cobrar. ¿Qué pasará cuando nos casemos? Yo tengo un muy buen crédito, ¿me afectaría también?

Freddy

Es necesario, aunque incómodo, tratar temas financieros con la pareja antes del matrimonio. Cualquiera de las partes debe entender que no se trata de desconfianza, sino de prevención justamente para conformar una sociedad conyugal sólida en todos los aspectos, tanto emocionales como financieros.

Publicidad

La sola intención de cumplir con pasivos financieros ya es una prueba de amor y responsabilidad evidente.

Este tema tiene dos aristas, la primera legal y la segunda financiera. Desde el punto de vista financiero, para responder por pasivos se debe evaluar el nivel de recursos mensuales netos determinando un presupuesto de efectivo personal. No es otra cosa que, tomando los ingresos percibidos, restar los gastos necesarios para vivir que se clasifican en fijos, es decir, que sus valores no varían, tales como el arriendo, cuota por seguro médico o similares; luego, aquellos que varían mensualmente y que se pueden disminuir, como pueden ser alimentación en casa en lugar de restaurantes, vestimenta, transporte –si es vehículo propio considerar la opción de compartirlo con vecinos o compañeros de trabajo a fin de repartir el gasto o tomar la opción de buses, taxirrutas, Metrovía–; posteriormente, aquellos que requieran salida de efectivo por deudas adquiridas previamente.

La diferencia resultante se convierte en ahorro, que es lo que permite, a futuro, cubrir emergencias, imprevistos o invertir con el fin de mejorar a futuro el patrimonio de la sociedad conyugal. En economía, el ahorro es la diferencia entre los ingresos y el consumo. La acumulación de ahorro se denomina capital y son los recursos que se convierten posteriormente en inversión.

Publicidad

La inversión es el único medio de crecer financieramente de manera sólida y sostenible, siempre que la misma acierte en los activos que le generarían mejores flujos futuros netos, sea por eficiencia o mejor tecnología, es decir, que le permita alcanzar mejores retornos o rentabilidades. La inversión es el medio necesario para generar riqueza.

Si la diferencia es negativa, es decir, los recursos netos no me permiten cubrir las cuotas de deudas adquiridas previamente, se tienen tres opciones comunes y una cuarta posible. Estas opciones son: aumentar ingresos, disminuir gastos variables o fijos (vivienda más barata) o diferir la deuda a plazos más largos a fin de conseguir cuotas más bajas, pero a más largo tiempo consiente que el pago total final será mayor.

Publicidad

La cuarta vía posible sería buscar un financiamiento más barato, es decir, con menor tasa de interés que le permita sustituir deudas con mayores tasas de interés por una sola con tasa menor; considerar que, en el escenario actual por estar en central de riesgo, es poco probable que alguna institución formal le otorgue el financiamiento.

Por otro lado, desde el punto de vista legal, por ser deudas adquiridas antes del matrimonio, no deberían afectar la sociedad conyugal en su origen, pero sí podría afectar a los activos adquiridos posteriormente dentro de la sociedad conyugal, por estar uno de sus miembros con problemas con acreedores bancarios o comerciales. En ese sentido, podrían formalizar el matrimonio con capitulaciones matrimoniales previas o separación de bienes, separando sus activos y pasivos individuales de los que se conformarán en la sociedad conyugal. (O)

Ing. Carlos Sarmiento, MT. FIAC SA, Consultores.

Email: gerencia@fiac.ec

X: @FIACECUADOR