Sumergirse en una refrescante piscina en un día caluroso es un placer incomparable, pero ¿qué pasaría si te dijera que podrías estar exponiéndote a riesgos para tu salud sin siquiera saberlo?

Las piscinas, a pesar de ser espacios de recreación y esparcimiento, pueden albergar microorganismos que causan enfermedades desagradables. En este sentido, es fundamental conocer las posibles infecciones que se pueden contraer al bañarse en una piscina aparentemente limpia.

Alergia al cloro: los síntomas más frecuentes que se manifiestan en piel y ojos tras un baño de piscina

Enfermedades comunes al bañarse en la piscina

Otitis

La otitis por sumergirse en una piscina es más común en niños. Foto: Shutterstock

Aunque no las veamos, el agua de las piscinas suele contener cientos de gérmenes y bacterias como las Pseudomonas, las cuales suelen ser la causa de la otitis, según Saber Vivir Tve.

Publicidad

Esta es una enfermedad, que se presenta con frecuencia en niños, que genera la inflamación del canal auditivo externo y puede también provocar la pérdida de la audición si no se trata a tiempo.

Pie de atleta

Una persona que camina descalza en las zonas de piscina o en las duchas públicas tiene muchas más probabilidades de sufrir pie de atleta, una infección por hongos que se presenta con picor, enrojecimiento y agrietamiento de los pies.

¿Para qué sirve orinar después de tener relaciones íntimas? Mitos y verdades de esta práctica tan común

Cistitis

La cistitis se caracteriza por causar inflamación, dolor y molestias en la vejiga. Foto: Shutterstock

De acuerdo con Saber Vivir Tve, esta es una enfermedad que se produce cuando las bacterias de E.coli, entre otras, se alojan en la vejiga. Esta infección produce síntoma como inflamación de la vejiga, aumento de la micción, dolor o ardor al orina.

Publicidad

Sin embargo, en algunas ocasiones se da la presencia de sangre en la orina, picor e irritación vaginal, fiebre o flujo espeso y grumoso.

Conjuntivitis

Por supuesto, los ojos no escapan de la posibilidad de enfermarse a causa de las bacterias y los virus que suelen proliferar en el agua de la piscina, siendo la conjuntivitis la consecuencia más común.

Publicidad

Esta es una infección que se caracteriza por inflamar la membrana que recubre el párpado y el globo ocular, causando así síntomas como lagrimeo, comezón y e irritación.

(I)

Te recomendamos estas noticias