La diabetes tipo 2 suele ser asintomática cuando la enfermedad está empezando, esto quiere decir que existe la posibilidad de que el paciente tenga los niveles de azúcar en la sangre elevados y no se dé cuenta, lo que puede significar un retraso significativo en el diagnóstico que incluso se puede extender a varios años.

La Clínica de la Universidad Navarra asegura que en la actualidad se considera que existe hasta un 50% de personas que tienen diabetes tipo 2 y todavía no cuentan con diagnóstico. Lo que hace que al momento de recibir la noticia, el 20% de estas personas ya tengan complicaciones de salud más delicadas.

Hay algunos malestares que pueden pasar desapercibidos | Foto: Archivo Foto: Freepik

Señales de alarma temprana poco conocidas de diabetes

El endocrinólogo Kevin Pantalone aseguró a la Clínica Cleveland que hay una serie de síntomas que tal vez no sean tan conocidos y que se pueden presentar en las primeras etapas de la diabetes, por lo que si alguien los tiene, lo mejor es acudir con un especialista, estos son:

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1. Infecciones urinarias u hongos frecuentes: al tener el nivel de glucosa en la sangre elevado y los riñones no pueden filtrarlo óptimamente, el azúcar termina en la orina, entonces, una mayor cantidad de esta sustancia en un ambiente cálido y húmedo produce infecciones urinarias y hongos, especialmente en mujeres.

Tengo 220 de glucosa en la sangre, ¿cómo la puedo bajar rápido?

2. Incrementan los problemas de la vista: ocurren porque los niveles elevados de azúcar distorsionan los cristales de los ojos y empeoran la visión. Los cambios en la graduación de anteojos o en la visión pueden ser un signo de diabetes.

3. Sensación de fatiga o agotamiento: aunque hay muchas formas en las que la diabetes puede producir fatiga o agotamiento, las razones más usuales son la deshidratación por la micción frecuente (que también puede alterar el sueño) y el daño renal. Este agotamiento puede persistir e incluso interferir con la rutina diaria.

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4. Decoloración de la piel: otro detalle que se debe tener en cuenta es el oscurecimiento en los pliegues del cuello y sobre los nudillos, también conocido como acantosis nigricans. Esto puede ocurrir por la resistencia a la insulina.

(I)

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