El embajador de EE. UU. en Ecuador, Michael J. Fitzpatrick, insistió en que su país continuará realizando los vuelos del control del narcotráfico en coordinación con el Gobierno ecuatoriano. El exembajador Francisco Carrión manifestó que estos vuelos deben efectuarse siempre y cuando haya un convenio entre los dos países. El embajador Fitzpatrick sostiene que cada vuelo lleva una tripulación de ambos países, con el intercambio previo de notas diplomáticas.

¿La cita entre los presidentes Donald Trump y Lenín Moreno estuvo programada o se dio de un momento a otro?

Estamos felices de mostrar que las relaciones bilaterales son fuertes y positivas. Ahora, luego de 17 años, hemos podido llegar a este punto, una visita de Ecuador a la Casa Blanca. Es cierto que fue anunciado hace unos días, pero hemos estado trabajando, de cerca con el Gobierno, desde hace mucho tiempo.

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El encuentro coincide con la llegada de la nueva embajadora Ivonne Baki.

Le damos la bienvenida a la nueva embajadora en Washington. Estamos muy contentos con que esté presente.

¿Qué expectativas tienen de su gestión?

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Por las relaciones entre los dos países es muy oportuno tenerla en Washington. Sabemos que vamos a tener a una embajadora muy activa y directamente involucrada en los temas con nosotros. Hoy, las relaciones están en un momento fantástico. Y quisiéramos utilizar esta visita para dar un impulso aún más fuerte en las relaciones diplomáticas, comerciales, de educación, colaboración regional sobre problemas de seguridad que enfrentamos.

La posibilidad de este encuentro en Washington evidencia una vez más el papel tan importante que está jugando el presidente Lenín Moreno; no solamente en Ecuador, sino a nivel regional”Michael J. Fitzpatrick, embajador de Estados Unidos

¿Se hablará sobre los aranceles, por ejemplo?

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Supongo que sí. Está en manos de los presidentes decidir sobre estos temas, pero el tema comercial es uno de los más importantes.

¿Está superado el debate provocado por los vuelos de EE. UU. en Ecuador para control de narcotráfico?

Hemos tenido esta colaboración desde hace un año y medio. Y cada vuelo es aprobado por Ecuador y hay equipos binacionales conformados por norteamericanos y ecuatorianos. No tiene sentido realizar vuelos para descubrir a los narcotraficantes en el mar si no tenemos gente de la Policía y de la Armada ecuatorianas presentes para ayudar en todo lo que se necesita para capturar y enjuiciar a los narcotraficantes.

¿Van a seguir esos vuelos?

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Claro que sí. Los vuelos están activos y con buenos resultados. En el último año se capturaron más de 35 toneladas de cocaína en alta mar con este tipo de colaboración. El programa funciona bien. Ha habido discrepancias, pero más que nada por falta de información, no porque haya algún roce entre las dos partes.

El exembajador Francisco Carrión dijo en la Asamblea que hace falta un convenio de cumplimiento obligatorio.

Estamos trabajando juntos en cada avión. En cada vuelo hay control del Gobierno ecuatoriano; cada vuelo es aprobado con intercambio de notas diplomáticas. No podríamos volar sin la aprobación del Gobierno ecuatoriano. Lo que queremos es que en vez de hacer intercambio (de notas diplomáticas) cada semana tengamos algo más global y más general de largo plazo, que muestre más confianza entre las dos partes.

¿Cómo vivió el proceso político del presidente Donald Trump en EE. UU.?

La semana pasada fue histórica. El presidente Trump salió no culpable por el Senado. Nuestros países están entrando en una época altamente política, pero los presidentes deben gobernar y van a gobernar.

Usted es un apasionado por el montañismo, ¿qué pasó con su pierna izquierda?, ¿por qué está con una bota protectora?

Me sometí a una cirugía de pierna y pie hace un mes, por una dolencia que se volvió crónica. La cirugía fue aquí, en Quito, a cargo de un equipo médico fantástico. Hace una semana me sacaron los puntos. Ya empecé la terapia y quizá en un mes o más estaré en bicicleta y luego en las montañas ecuatorianas.

¿Cuál montaña le ha llamado más la atención?

Hay varias. La última que hice fue el Illiniza sur, antes de la Navidad. Fue, justamente, cuando me di cuenta de que ya no podía con mi pie. Hay unos glaciares y unos campos de hielo increíbles.

¿Cómo está la situación de los glaciares ecuatorianos?

Desafortunadamente, en todos los países que he estado, y que han sido varios, los glaciares están retrocediendo rápido. Veo que, durante mi carrera diplomática, en tres décadas, han perdido quizás la mitad de su tamaño.

¿Qué se debería hacer en este tema?

Todos tenemos que hacer algo. Es una lucha compartida, como todas las que tenemos: contra los narcótico, el coronavirus... Y la lucha en favor del planeta es global; ningún país puede enfrentarlo solo. Hay que hacerlo en equipo y con socios, porque así es más fácil y mejor.

¿Le preocupaba el hecho de que el Ecuador posiblemente tenía una persona infectada con coronavirus?

Sí. Investigamos con el Ministerio de Salud y nuestros expertos. Felizmente, no fue un caso de coronavirus, pero lamentablemente el señor murió. Hemos visto que el coronavirus ha sido un peligro para todos y no solamente para China.

¿Cómo se siente en Quito?, ¿valió la pena venir al Ecuador?

Valió la pena. Estamos muy felices de estar aquí, no solamente porque hay un equipo fantástico en la Embajada, sino porque tenemos socios extraordinarios en el gobierno del presidente Moreno y su gabinete, entre la sociedad civil, en el sector privado... Estamos aquí como socios estratégicos, para colaborar y caminar juntos. (I)