(Actualizado a las 18:20)

El recinto La Escobería se llenó de agentes, peritos y personal de Fiscalía que apartaron a los curiosos para recoger indicios del doble asesinato registrado la mañana de jueves 21 de mayo en ese sector de la provincia del Guayas.

Una pareja fue acribillada cuando viajaba en su moto. Los fallecidos fueron identificados como Modesto Juvencio Torres Castro, de 50 años, y Senovia Lourdes Chipre Ruiz, de 42.

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Ocurrió en el distrito Pedro Carbo, minutos antes de llegar a Lomas de Sargentillo.

Los cadáveres fueron hallados en una carretera de tercer orden, junto a la motocicleta. Ambos tenían lo0s rostros cubiertos por mascarillas y recibieron varios disparos.

Según los peritos, ella recibió varios tiros en la cabeza, mientras ModestoTorres los recibió en el pecho. La pareja tenía varios hijos. El hombre portaba un grillete electrónico en el tobillo pues meses atrás allanaron su casa y hallaron armas, pero un juez le otorgó medidas sustitutivas y obtuvo la libertad.

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Criminalística llegó al sector y levantó varios indicios balísticos (casquillos).

Según los moradores, la pareja habría sido baleada desde un vehículo desconocido que huyó por la carretera.

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Agentes de la Unidad de Muertes Violentas de la Policía en presencia del fiscal César Peña realizaron varios allanamientos por el sector y un operativo para dar con los responsables del crimen.

Peña ordenó el levantamiento de los cadáveres y su traslado a la morgue de Daule.

Los crímenes en la provincia del Guayas no han dado tregua ni durante las semanas de cuarentena. Solo en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) se han registrado más de 53 muertes violentas desde el 16 de mazo, casi un fallecido por día en promedio.

El último caso se registró la mañana de este miércoles en Flor de Bastión, en el km 12 de la vía a Daule, en el noroeste.

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Ahí dos hombres fueron baleados en el interior de un auto gris luego de ser seguidos durante varios minutos por un vehículo color negro.

Los ocupantes de un carro negro se bajaron y dispararon a los hombres que recibieron balazos en la cabeza.

Los vecinos dijeron que tras los frenazos pensaron que eran agentes policiales siguiendo a unos ladrones, pero que se alarmaron al escuchar una serie de disparos que descargaron contra las víctimas.

Agentes de Criminalística llegaron al sector, levantaron siete casquillos en la escena y revisaron el recorrido realizado por las víctimas en busca de más indicios balísticos.

Uno de los fallecidos era conductor informal, mientras que el otro hombre era su cliente habitual. El conductor tenía 28 años y no registra antecedentes, mientras su clientes, identificado como Óscar Camino, tenía 13 procesos judiciales, por robo y tráfico de drogas.

La policía sospecha que esta última sería la motivación del crimen, pues la lucha de territorio no solo ha causado decenas de asesinatos en el sur de Guayaquil, sino también en el noroeste y Pascuales.

Hace dos semanas tres cuerpos maniatadas y con signos de tortura fueron hallados en la zona conocida como La Ladrillera (entre Monte Sinaí y Bastión Popular). A uno de ellos le habían cortado los dedos. (I)