Tras un percance ocurrido ayer en varias zonas del país, la mañana de este martes 3 de octubre el Ministerio de Energía informó que se hará una “desconexión puntual de la demanda eléctrica entre las 16:00 y 17:30″ hasta el jueves 5 de octubre.

El Ministerio de Energía indicó que “debido a una disminución temporal de la transferencia de potencia desde Colombia, por un mantenimiento de su infraestructura eléctrica, se han identificado condiciones de posible escasez puntual de potencia en el sistema eléctrico ecuatoriano, situación que se mantendrá hasta el jueves 5 de octubre”.

Autoridades tranquilizan a ciudadanía y cambian anuncio indicando que ya no habrá desconexiones puntuales

Además, la entidad informó que “con el fin de mantener la estabilidad y confiabilidad del servicio, el Operador Nacional de Electricidad (Cenace) coordinará con las empresas de distribución una desconexión puntual de la demanda eléctrica entre las 16:00 y 17:30″.

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“La medida se aplicará en la magnitud que fuere estrictamente necesaria”, explicó la cartera de Estado. Y con ella aseguró que se mantendrá la estabilidad y confiabilidad del servicio eléctrico nacional. Y destacó que “estas acciones no tienen relación con racionamientos eléctricos”.

Pero pocas horas después la alerta fue desestimada por el propio ministro de Energía, Fernando Santos Alvite; el gerente de Cenace, Gabriel Argüello, y por el gerente de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), Gonzalo Uquillas. Esto porque Colombia se comprometió a entregar la energía como estaba previsto.

El anuncio inicial fue criticado por el exministro de Electricidad y actual catedrático universitario Esteban Albornoz. Él fue ministro en el 2009 y entonces también le tocó anunciar un plan de racionamientos en el país, con un aporte del 5% de cada una de las eléctricas a nivel nacional.

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Ahora aseguró que lo anunciado este martes por el ministerio es una suerte de eufemismo. Dijo que realmente ya se han empezado a producir los racionamientos eléctricos, producto de la falta de generación y que ya se puede hablar de que ha vuelto el “fantasma de los apagones”. Explicó que es un error tener que depender de la energía de Colombia para abastecer la energía de Ecuador, pues esta no es firme, sino que es una generación de oportunidad.

Para Albornoz, el Gobierno debió haber garantizado con muchos meses de anticipación el buen funcionamiento del parque térmico (que debe entrar en pleno funcionamiento cuando hay estiaje, como ahora).

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También criticó que el Gobierno continúe diciendo que se aplicarán medidas como la importación de gas o la contratación de una barcaza, que en realidad se podrían concretar en meses posteriores a los problemas que ya se están presentando en este momento.

Sobre los racionamientos ocurridos el lunes, explicó que estos ocurrieron en varias distribuidoras.

  • CNEL Guayaquil tuvo una disminución de 49 mw
  • CNEL Guayaquil Los Ríos, tuvo una baja de 30 mw
  • Empresa Eléctrica Quito también 30 mw
  • CNEL Manabí tuvo una disminución de 30 mw
  • Empresa Eléctrica Centro Sur registró una baja de 7 mw
  • Eléctrica Eléctrica Regional Sur (Loja) 7 mw

Fernando Salinas, analista energético, explicó que es el operador nacional (Cenace) la entidad responsable de la operación del Sistema Nacional Interconectado. Además, recordó que de lo que se conoce el primer problema, registrado el lunes 2 de octubre, que dejó sin luz a varios sectores del país, se habría generado entre las 16:00 y 18:00 debido a que hubo una baja o disminución de la generación de 120 mw de lo que estaba previsto en el despacho económico. El percance habría ocurrido por una baja de entrega de la energía que estamos comprando desde Colombia. El déficit de energía hizo que Cenace decida las restricciones.

Entre tanto, Salinas dijo que se debe distinguir entre restricción puntual y apagones. En el primer caso, es un evento sin planificación, mientras que el apagón ya tiene que ver con una planificación. “Si se siguen repitiendo serán apagones”, explicó.

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Este lunes, ciudadanos de varios sectores en Guayaquil y Quito reclamaron por la falta de servicio eléctrico en sus hogares, oficinas y alumbrado público. En el Puerto Principal las quejas apuntaron que no hay suministro en sitios del noroeste y sur como Santa Mónica, cooperativa Santiaguito Roldós, La Ladrillera, entre otros.

Algunas de las zonas afectadas en la capital fueron el norte como Monteserrín, El Batán, alrededores del parque Bicentenario; y en el sur, en Chimbacalle, Chillogallo, entre otros.

Adicionalmente, Salinas duda que se puedan aplicar las medidas que ya han sido anunciadas por las autoridades:

Provisión de alrededor de entre 40 y 50 millones de pies cúbicos para que funcionen un par de unidades de Termogás Machala y la entrada de una barcaza 300 mw que funcionaría con fuel oil. Aseguró que dichas medidas no serían para este estiaje: “Si se utiliza la infraestructura de Campo Amistad habría que construir una infraestructura cuya construcción duraría ocho meses”, dijo. La barcaza podría llegar también retrasada. “Siendo optimistas estaría en el mes de enero, es decir, con cuatro meses de retraso”.

La situación actual, de estiaje y problemas de generación de energía, trae a la memoria momentos como los de la Hora de Sixto u hora Sixtina, en 1993 (hace 30 años) cuando debido a la falta de energía se buscó ahorrarla adelantando los relojes una hora para así realizar las actividades desde más temprano y así ahorrar luz. (I)