La producción petrolera empieza a recuperarse en Ecuador tras superar los problemas de suspensión del bombeo de los tres principales ductos debido a la erosión regresiva del río Coca y sus afluentes (Quijos y Piedra Fina), en el sector del Reventador, que se dio a fines del 2021. Desde el 8 de diciembre, el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), y desde el 10 de diciembre el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) de Petroecuador suspendieron actividades. OCP retomó el bombeo el 31 de diciembre de 2021 y el SOTE, el 1 de enero de 2022.