Las declaraciones del presidente del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Eduardo Peña, el miércoles 23 de abril, en Cuenca, tras un conversatorio sobre las mesas de diálogo ciudadano por la seguridad social, encendieron el debate sobre si se debe o no incrementar la edad de la jubilación, que actualmente es de 60 años.
Peña dijo: “Si nosotros tenemos que jubilar personas, pagar pensiones a personas que se jubilan a los 65 años que se morían antes a los 70 (años), le pagamos cinco años, pero si hoy se mueren en promedio a los 81 (años) tenemos que pagar 16 años de pensión. Entonces, cómo financiar 16 años en vez de cinco, hay que pensar en las mesas cuál es el mecanismo”.
A pesar de que horas después el IESS aclaró que Peña “en ningún momento afirmó que se va a elevar la edad de jubilación”, no deja de ser una de varias alternativas que se discuten para darle sostenibilidad al fondo de pensiones.
Publicidad
El financiamiento, la institucionalidad y la sostenibilidad de la entidad enfrentará graves problemas que llevarán a tomar serias decisiones en el futuro, alertan expertos consultados por este Diario.
Varias alternativas se han planteado como soluciones en diferentes informes y estudios para la sostenibilidad del IESS, que no necesariamente se enfocan en elevar la edad de la jubilación, aunque analistas no lo descartan siempre y cuando sea de forma proporcional, pero más allá de eso, consideran que “para cualquier ajuste primero se tienen que corregir las causas” de los problemas.
La sostenibilidad del fondo de pensiones del IESS, uno de los desafíos que debe afrontar el país
“No podemos dejar de aceptar que el IESS tiene una crisis”, dice la abogada experta en material laboral Vanessa Velásquez, quien indica que ya se dijo en el informe que se presentó en el gobierno de Guillermo Lasso que el número de aportantes para el pago de un jubilado ya no corresponde a lo que necesita el IESS y hoy es una crónica de una muerte anunciada y crea un problema de sostenibilidad de la institución y el pago de jubilaciones.
Publicidad
“Cuidado con que estemos entrando en la crisis de tener solo tres afiliados para un jubilado y con ello no podamos cubrir las pensiones y una vez más nuestros ancianos y personas de la tercera edad sean los que tienen que pagar la factura precisamente por no haber tomado decisiones oportunas”, señala.
En el 2023, la Comisión Interinstitucional, presidida por Augusto de la Torre, presentó un informe en el que se trató el tema del fondo de pensiones del IESS.
Publicidad
Según Velásquez, está identificado que el IESS tiene varios problemas y en varios análisis de investigación y de opinión se puede verificar que es un problema de financiamiento, de institucionalidad y de sostenibilidad. “Son los tres puntos más importantes de la crisis del IESS. Se tiene que dar cobertura a los hijos menores de edad, a los cónyuges apenas con un aporte adicional y eso ha ahondado con la crisis”, asegura.
Jubilación patronal: Consejo de Trabajo conocerá el proyecto de reforma el martes 29 de abril
Para el presidente del Frente Nacional por un Nuevo IESS, Henry Llanes, las autoridades no señalan las verdaderas causas de carácter estructural que ha llevado al IESS a “una profunda crisis y que, de no corregirse, la entidad puede colapsar y eso puede causar una hecatombe social de impredecibles consecuencias”.
Según Llanes, hay varias causas que le “tienen cuarteado el piso al Seguro Social”, entre ellas, la morosidad del Estado en el pago de sus obligaciones, que viene desde 1951 hasta la actualidad. Dice que el Estado incumple en dos aspectos, en su condición de empleador no ha sido puntual en el pago de las obligaciones patronales y en la transferencia de recursos vía presupuesto general del Estado y este último es un “problema gravísimo”.
Dividiendo en periodos, Llanes indica como primero, que de 1951 a 1984 el Estado le debía al Seguro Social 85.927 millones de sucres y de esa deuda avanzó a recaudar algo más del 10 %, mientras que el 90 % no.
Publicidad
Luego, de 1985 a 2007, el Estado le debía $ 3.474 millones, pero con el cambio de método se redujo a $ 883 millones, pero no se incluyeron los $ 3.700 millones del déficit del sistema actuarial de pensiones, ni tampoco la deuda del Estado, solo lo que es deuda por obligaciones del 40 % y otras más.
Para el tercer periodo, dice que la deuda viene acumulándose desde el 2006 y del 40 % desde el 2012 y para noviembre del 2024, el monto de la deuda del Estado era de $ 24.233 millones.
Estudio analizó las necesidades y desafíos de los trabajadores de más de 50 años en Ecuador y Perú
En este aspecto de morosidad, Llanes incluye al sector privado, el cual dice que tiene una deuda que se acumula desde 1999 y a septiembre del 2024 estuvo en $ 2.600 millones, dice citando cifras del Gobierno.
A esto agrega que se crearon prestaciones médicas sin el debido financiamiento, como el caso de la cobertura para los hijos de los afiliados, así como la atención médica a personas que no son afiliadas al IESS, como las personas con discapacidad o quienes sufren de enfermedades catastróficas. Otro punto que menciona es el haber incluido en la Ley de Seguridad Social a los seguros especiales, como el Seguro Social Campesino y el trabajo no remunerado en el hogar.
Velásquez señala que los cálculos actuariales que hoy en el país se manejan han evidenciado que la edad en que los ecuatorianos aparentemente podrían empezar en un proceso de jubilación, cada vez se tienen más expectativas de vida, entonces es muy complicado mantenerle la edad de jubilación.
Comenta que sí se van a tener que hacer ajustes respecto del tiempo al que se acceda a la jubilación, por lo cual van a tener que hacerse cambios y en este menciona algunos puntos, empezando por:
- Incrementar el aporte para la cobertura a cónyuges, que ahora es de 3,41 %. Dice que debería ser un aporte mucho más alto para que la cobertura de salud no siga encareciendo esta sostenibilidad, ya que es uno de los puntales de los problemas que tiene el IESS.
- Incrementar el universo de afiliados con profesionales y con los trabajadores autónomos, por ejemplo, todos los repartidores de las diferentes plataformas.
- Incrementar la edad para la jubilación, pero inversamente proporcional por lo que han aportado, para que quienes ganen más subsidien de alguna manera a quienes ganan menos.
- Aportaciones más altas para mejorar la jubilación patronal escalonada conforme a los ingresos de los aportes históricos.
Con esos puntos, Velásquez cree que hay varias alternativas, sin embargo, sostiene que es complicado porque de alguna manera no son muy populares, porque se obligaría a un segmento del ejercicio profesional a aportar en el IESS, así como a los trabajadores autónomos, pero considera que es la única forma porque si no amplían el universo va a ser muy complicado.
Para Llanes, antes de pensar en incrementar la edad de jubilación se deben corregir las causas que han ocasionado los problemas estructurales del IESS. “¿Cómo creer en incrementar la edad de jubilación cuando no se han corregido las causas?, pregunta.
“Me parece una acción arbitraria que se quiera incrementar la edad de jubilación o los aportes y las cosas dejar como están, no hacer nada, para cualquier ajuste primero se tienen que corregir las causas”, enfatiza.
Y como soluciones, Llanes sugiere que se fije un plan de pagos anual a diez años. Dice que en un proyecto de ley propusieron que el IESS sea accionista de los sectores estratégicos y que el Estado transfiera las acciones del Banco del Pacífico como parte de pago para que el Seguro Social sea accionista, mas no para que gestione o gerencie esa entidad bancaria, sin embargo, dice que “echaron abajo esa propuesta”.
Reforma al IESS debería realizarse en 2025: ‘Como está el sistema no dura 40 años’
Por su parte, la abogada en Derecho de Seguridad Social y Derecho Laboral Patricia Borja indica que partiendo de recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se debería analizar la temática desde varias aristas:
- La necesidad de determinar e implementar un modelo de financiamiento óptimo del Seguro de invalidez, vejez y muerte. Dice que desde el 2001 este Seguro está sujeto a un régimen de transición con un esquema de reparto y se podría pensar en un esquema de dos pilares: solidario y uno de cuenta individual como la cesantía, ambos administrados por el IESS.
- Revisión de factores que fomenten la eficiencia en la gestión de este Seguro y de sus recursos.
- La situación del empleo también es un factor importante en el marco de esta discusión.
- Además, en el marco de una reforma legal también sería indispensable pensar en medidas que corrijan distorsiones del sistema. (I)