En un rincón de la selva amazónica ecuatoriana, ha surgido una nueva marca de café que no solo despierta el paladar, sino también el alma y el espíritu de quienes lo prueban. Se trata de Nuna Kafee, una marca que se ha convertido en una historia de emprendimiento, unión cultural y pasión por la calidad.
El nombre es un testimonio de la diversidad cultural. “Nuna” proviene del quichua y significa “alma” y “espíritu”. Por su parte, “Kafee” es un guiño a un dialecto africano y una referencia cariñosa a su fundadora, Lissette Sánchez, de 29 años, conocida como ‘negra’ por sus seres queridos.
Sánchez es una microempresaria con un espíritu emprendedor en constante evolución. Comenzó su carrera como comisionista de cacao. Sin embargo, su vida dio un giro inesperado cuando una proveedora le regaló una bolsa de café de la región amazónica que encendió su chispa emprendedora.
Publicidad
La idea de crear una marca de café surgió en colaboración con su cuñada, Pamela Espinoza, de 39 años, meses antes de la pandemia. Ambas compartían el sueño de abrir una cafetería y decidieron hacerlo realidad con su propia marca de café. La muestra que Lissette recibió en ese momento desencadenó un entusiasmo compartido, y así comenzó la entrega periódica de café a sus clientes.
El camino de Nuna Kafee no fue sencillo. Inicialmente, el producto se empacaba en simples bolsas de papel, pero la cálida acogida de la marca entre los clientes impulsó a Lissette y su equipo a evolucionar. Actualmente, los granos de café son envasados en un empaque importado equipado con una válvula que preserva el aroma, garantizando una experiencia enriquecedora en cada taza.
Los clientes de Nuna Kafee son tan diversos como la marca misma, abarcando edades desde los 23 hasta los 75 años. Lo más sorprendente es que este café amazónico, a diferencia de otros tipos y marcas, no produce acidez ni insomnio en quienes lo disfrutan. Los clientes aseguran que, además de su exquisito sabor, han notado mejoras en su salud gracias a su consumo regular.
Publicidad
Lo que comenzó con la venta de unos pocos paquetes semanales se ha convertido en la venta de más de cien paquetes al mes. Este éxito ha llevado a Lissette y Pamela a invertir en los permisos y regulaciones necesarios para ahora expandir la marca. (I)
