A sus 11 años, Valentina Boscov está aprendiendo francés en la Alianza Francesa ubicada en el norte de Quito. Sin embargo, esto no estaba en sus planes, pues, aunque su sueño es convertirse en una maestra de lenguas, llegó a este lugar por un concurso de becas para estudiar en una institución particular; de 124 niños, ella se ubicó en el último grupo, de 10 integrantes.

Diez estudiantes de distintos planteles fiscales de Quito concursan por una beca de excelencia educativa en el Liceo Franco Ecuatoriano La Condamine. Los alumnos de séptimo año de educación básica son parte de una capacitación del idioma en la Alianza Francesa, antes de llegar a la fase final, que les permitirá estudiar en este colegio con todo pagado.

La Subsecretaría de Educación de Quito es la entidad que llegó a este acuerdo con el colegio La Condamine. Los estudiantes contarán con la totalidad de matrículas, pensiones, transporte escolar, restaurante, actividades extracurriculares, salidas y viajes educativos.

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Además, se les otorgará $ 500 para la compra de vestimenta escolar, material pedagógico, deportivo y cultural desde octavo año de educación básica hasta tercero de bachillerato.

Cinco niños y cinco niñas fueron seleccionados de un grupo de 124 postulantes. Para que lleguen a esta instancia final se tomaron en cuenta los resultados académicos y la carta de recomendación de sus tutores.

Enrique Pérez, subsecretario de Educación, indicó que es una nueva oportunidad para la vida de los estudiantes. Este proyecto se inició con un grupo de casi 600 estudiantes; después bajó a 124. Ellos escribieron una carta de por qué querían la beca.

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“Es dar oportunidad a niños que no la tienen, que se va a cambiar la vida de ellos, de los hijos de ellos y de las demás generaciones, porque hay un cambio total”, expresó.

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Los estudiantes son de distintos planteles educativos; algunos se tienen que trasladar desde Alangasí, Mitad del Mundo, Tumbaco, entro otros sectores. No obstante, la distancia no ha frenado sus ganas por aprender más y ser parte de la pareja ganadora de este concurso que se realiza por tercera edición.

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Lauro Revelo dijo a este Diario que, como abuelito de una de las estudiantes del grupo final, es un orgullo para la familia. “Le veo tan tranquila, no le importa que no tenga vacaciones, le gusta estudiar y sé que va a salir adelante”, argumentó con alegría.

Lo mismo sienten los demás representantes de los estudiantes. Gabriela Salas, madre de otro alumno de este selecto grupo, recibió la noticia con mucha alegría. Su hijo siempre les dijo que quiere estudiar en otro país.

“El sueña con cambiar el mundo, quiere ser doctor y después poner una fundación para ayudar a los demás niños”, agregó la madre de familia, quien está muy agradecida por este proceso que le ayudará en los estudios a su hijo.

Formación en Francia

Marie Gabrielle Cavé, presidenta de la Fundación La Condamine, señaló que los estudiantes salen con dos lenguas habladas de manera perfecta: el español y el francés. “Nosotros siempre trabajamos con clases los dos idiomas. Los estudiantes saldrán graduados de los dos bachilleratos, el ecuatoriano y el francés”, precisó.

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Además, informó que en Francia existe un sistema de becas para los estudios superiores. Es decir, los alumnos más sobresalientes podrían aplicar a una solicitud de beca con el Gobierno de Francia, el cual maneja distintos planes de beca con un porcentaje. Desde el colegio La Condamine, cada año envían a uno o dos ecuatorianos que van becados.

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Esta preparación se inició el 30 de mayo y terminará el 14 de agosto; después de esto se anunciarán los dos estudiantes que tendrán la beca. Los ocho estudiantes restantes tendrán un año completo de clases en la Alianza Francesa, por lo que de por sí ya son ganadores por formar este selecto grupo.

Los cuatro estudiantes ganadores de las anteriores ediciones se encuentran cursando sus estudios de manera regular. De hecho, según la Subsecretaría de Educación, ellos están destacando académicamente en sus respectivos cursos. (I)