Un estudio desarrollado por investigadores de la Universidad de Guayaquil, Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio), Centro de Investigación Biodiversidad Sostenible-Bios y Forest Resources Management confirma la presencia de doce especies de mamíferos grandes y medianos dentro del Bosque Protector Petrificado de Puyango, un área natural con alto valor paleontológico que está ubicada entre las provincias de El Oro y Loja.

Durante 84 días de muestreo efectivo, los investigadores Jaime A. Salas, I. Benjamín Navas, Kevin Peñafiel, Ronald Bravo-Salinas y Cindy M. Hurtado, (Salas y Bravo asociados al Inabio), obtuvieron 156 eventos fotográficos independientes, con el registro de doce especies de mamíferos grandes y medianos nativos, distribuidos en once géneros, siete familias y cinco órdenes. Además, se registraron cuatro especies intro­ducidas: Sus scrofa (Suidae), Canis lupus fa­miliaris (Canidae), Equus caballus (Equidae) y Bos taurus (Bovidae).

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Entre las especies registradas con mayor frecuencia reportan a Eira barbara (cabeza de mate), Didelphis marsupialis (zarigüeya común) y Procyon cancrivorus (mapache cangrejero), las que son consideradas de alta adaptabilidad a hábitats fragmentados o intervenidos y con amplia distribución geográfica en el occidente del Ecuador, pero especies como Nasua nasua (coatí de cola anillada), Leopardus pardalis (ocelote) y L. wiedii (tigrillo) fueron menos frecuentes en este estudio.

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Una posible explicación para la baja detectabilidad en N. nasua y L. pardalis es que tienen densidades poblacionales bajas en este bosque protector, pues presentan valores de abundancia relativa más altos en estudios similares, mientras que en el caso de L. wiedii podría deberse a bajas densidades poblacionales propias de la especie por su biología reproductiva; también es posible que estas especies presentaran un uso de hábitat limitado en esta localidad.

Los registros de yaguarondi, hurón, tamandúa norteño, pecarí de collar y agutí centroamericano son recientes en varias localidades. Foto: Cortesía Inabio. Foto: A4

Llama la atención la ausencia de registros en el área de estudio de ciertas especies de mamíferos terrestres que tienen amplia distribución en el país; por ejemplo, carnívoros, como el jaguar (Panthera onca), el yaguarondi (Herpailurus yagouarondi) y el hurón (Galictis vittata); insectívoros, como el tamandúa norteño (Tamandua mexicana); omnívoros, como el pecarí de collar (Dicotyles tajacu), y frugívoros, como el agutí centroamericano (Dasyprocta punctata).

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Los registros de yaguarondi, hurón, tamandúa norteño, pecarí de collar y agutí centroamericano son recientes en varias localidades y áreas protegidas de la Costa ecuatoriana, en las provincias de Manabí, Los Ríos, Guayas y El Oro.

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Por este motivo, su ausencia en el área de estudio podría reflejar un proceso de defaunación local en Puyango de­rivado de la remoción o eliminación no selectiva de especies, reforzado por una pérdida de la calidad de hábitat.

El objetivo de esta investigación, según el comunicado, fue evaluar la riqueza, abundancia y patrones de actividad de los mamíferos grandes y medianos en el Bos­que Protector Petrificado de Puyango, además de comentar sobre sus amenazas y prioridades de conservación.

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En este sentido, y de forma general, las principales amenazas que soportan estas especies son el cambio de uso de suelo por deforestación y ampliación de la frontera agrícola, el crecimiento de la población humana y el comercio ilegal, lo cual es un denominador común a lo largo de la Costa ecuatoriana.

Adicionalmente, los perros domésticos podrían ser una amenaza no reportada para los mamíferos medianos y grandes en el Bosque Protector Petrificado de Puyango, pues pueden provocar transmisión de patógenos y enfermedades a las poblaciones de mamíferos nativos, así como competir por recursos, provocar solapamiento de patrones de comportamiento o inclusive depredación. (I)

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