Polo Baquerizo fue por 40 años presentador del popular programa de concursos Haga negocio conmigo. Conocido como el Eterno Perdedor, en 1998 fue candidato a diputado del Guayas, y ganó, por la desaparecida Democracia Popular, cuya carta presidencial fue Jamil Mahuad. En el 2002 renunció al Legislativo para postularse como primer candidato a concejal de Guayaquil por el Partido Social Cristiano (PSC).

El audaz Polo Baquerizo sigue en TC Televisión, aunque se lo ve poco en pantalla. Ahora es tiktokero.

Fue concejal de Guayaquil por 16 años, del 2003 al 2019.

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1.- ¿Qué convence a un animador de televisión popular, que brilla en su carrera, de participar en política?

Lo que pasa es que yo vengo de padre y abuelo de ancestro político. Lo que la gente no sabe es que yo odiaba la política, me fastidiaba, me molestaba, porque uno ve mucha ingratitud; yo veía eso. Hay una máxima que dice: “Cuando tenía dinero me llamaban don Tomás, ahora que nada tengo me llaman Tomás no más”. Cuando usted está en la política o aun en el trabajo, en determiandas instancias o niveles, todo el mundo le cae: “Hermano, brother, yunta”, y hasta parientes que no son parientes se dicen parientes. En el momento en que usted terminó ahí, en el área privada, no se diga en el área pública: “¿Y dónde están, que no se ven?”.

2.- ¿Qué le dejó la política?

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Yo creo que la política hizo que la gente me viera en otra faceta. Cuando yo fui candidato, me dijeron: “Un payaso de candidato a diputado”. Yo jamás me puse a discutir con nadie; yo seguía mi camino. (Decían) que iba a ser un títere, borrego, asado, cocinado, y yo demostré que no fue así. Yo presenté trece, catorce proyectos. Uno de los proyectos, a muchos les temblaba la mano, yo tenía la mano firme para poderlo presentar. Yo tenía que ir de uno en uno (para que firmaran). Era una reforma a la Constitución: la descentralización y desconcentración de los poderes del Estado. Para que tenga idea, yo presenté una ley para discapacitados, para medios de comunicación, la exoneración de los intereses a los deudores de la Ecapag; ese fue el primer proyecto, porque el Gobierno de Fabián Alarcón canceló la deuda que tenía la Ecapag y todos los deudores estaban tragados, porque se les había acumulado. En el momento en que se les condonan los intereses fue un respiro, sin tomar en cuenta los proyectos de los metros cúbicos de agua, energía eléctrica, etc.


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3.- Usted decía que se lo calificó de payaso, y cada vez que hay elecciones y entra gente de TV a la papeleta se lo cuestiona. ¿Quiénes tienen derecho a participar?

Todos tienen derecho a participar. Usted la capacidad no la puede medir por el título. En la vida se aprende a nadar nadando y no por correspondencia: las cosas por su nombre. En el camino de la vida uno se va forjando. Yo no tuve escuela para entrar a la radio o la televisión; me forjé solo en el camino, me fui puliendo, aprendiendo: esa es la vida. Pero que se quiere decir que un comunidador social o que un artista no puede ir... ¿Y por qué no puede ir? Puede haber comunicadores sociales que lleguen y fracasen, o puede haber comunicadores sociales como muchos abogados, economistas, etc.

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4.- Usted es comunicador social...

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No uso mi título nunca; prefiero que vean a la persona. Más bien, los títulos no me dicen nada. Usted puede preguntar: en el Congreso me decían “diputado”, y yo respondía: “No, dígame Polo”; en el Concejo Cantonal, “concejal”, (y yo respondía): “Me llamo Polo; yo no me llamo Concejal”.

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5.- Regresaría a la función pública?

Yo pienso que no. Pienso que no.

Guayaquil, 29 de diciembre del 2022. Entrevista a Polo Baquerizo. Foto : Francisco Verni Foto: El Universo