En Egipto, un grupo de arqueólogos hallaron lo que podría ser el cementerio de mascotas más antiguo del mundo. Está ubicado en el antiguo puerto romano de Berenice y en el lugar han desenterrado restos de alrededor de 600 animales, la mayoría de ellos son gatos, que habrían sido inhumados durante los siglos I y II de nuestra era, se indica en una publicación de National Geographic.