La noticia del asesinato a tiros del presidente haitiano, Jovenel Moise, durante la madrugada de este miércoles, que fue perpetrado por un supuesto comando extranjero, ha conmocionado a la región y al mundo y pone en evidencia la crisis política y de seguridad que se ha agudizado los últimos meses en ese país, donde opositores desde hace meses pedían la dimisión del difunto mandatario que gobernaba por decreto y sostenía que su periodo duraba hasta el 7 de febrero de 2022.