Caso Nene: este es el relato de Rommel P. sobre cómo Francisco Sebastián B. A. y un asesor de la vicepresidenta supuestamente le pidieron parte de su salario como ‘diezmo’

En la audiencia de formulación de cargos contra Francisco Sebastián B. A., hijo de la vicepresidenta de la República, Verónica Abad, el pasado jueves 21 de marzo, la Fiscalía leyó el testimonio del comunicador Rommel P., quien fue el denunciante en este caso, al que se ha denominado Nene, y en el cual se indaga una supuesta oferta de tráfico de influencias.

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Rommel P. contó a las autoridades que su relación laboral con Abad, su hijo y el asesor Daniel R. comenzó en enero del 2023. Abad era candidata a la Alcaldía de Cuenca por el movimiento Amigo.

Él se desempeñó como director de Comunicación; acordaron un salario de $ 1.500, pero inicialmente le pagaron $ 700 y le ofrecieron darle el resto luego, lo que sí ocurrió.

Unos meses después, un grupo de comunicadores que trabajó en esa campaña lo contactó para pedirle que firmara con ellos una demanda contra Abad para exigirle el pago de sus sueldos. Él dijo que lo pensaría, y luego recibió la llamada de Daniel R., quien le habría ofrecido $ 500 para que no se sumara a la querella, pero él aseguró que no lo aceptó.

Según su relato, el asesor de Abad lo llamó “desagradecido”, a lo que él respondió que no era justo lo que estaban haciendo con estos excolaboradores. Finalmente, sí firmó la denuncia. El grupo de exempleados logró que se le pagaran $ 10.500, monto que se repartieron entre todos.

Rommel P. indicó que, unos pocos días después de la segunda vuelta, la vicepresidenta electa, Verónica Abad, lo llamó por teléfono para ofrecerle empleo. “Quiero que trabajes conmigo, ponte en contacto con mi asesor Daniel R.”, le habría señalado la funcionaria.

Cuando ambos dialogaron, Daniel R. le habría recriminado con evidente resentimiento que lo estaban tomando en cuenta pese a que los había demandado poco antes. A lo que él le reiteró que lo hizo porque le parecía injusta la forma en que actuaron. En ese momento no se fijó el monto de su salario.

Rommel P. dijo que se presentó temprano el primer lunes de noviembre del 2023 en el hotel Marriott de Quito, en donde se concentraba el equipo de Abad.

La posesión del binomio presidencial se realizó el 23 del mismo mes.

En esos días, prosiguió Rommel P., otra asesora del equipo le pidió entregar todos sus papeles para ingresar en la Vicepresidencia. Le dieron el cargo de coordinador general de Comunicación de la Vicepresidencia.

El comunicador dijo que desarrolla su trabajo bajo las directrices de Daniel R. y de Carolina M., quien es la esposa de Francisco Sebastián B. A.

“El 8 de diciembre, Verónica Abad me llama y me dice que Daniel R. me va a hacer la propuesta de sueldo”. Ella viajó ese día a Israel para cumplir la delegación que le hizo el presidente Daniel Noboa como embajadora de Ecuador en ese país.

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Efectivamente, el asesor lo citó ese mismo día a un salón de reuniones del hotel Marriott. Ahí, según su relato, lo esperaban Daniel R. y Francisco Sebastián B. A., quienes vigilaban que no grabase la conversación con el teléfono.

Francisco Sebastián B. A. le habría manifestado que le pagarían $ 3.200. “Sacó un libretín de letras de cambio y veo que empieza a llenar y saca el celular para hacer cálculos, veo el valor de $ 30.600 y me dice que es el monto que tengo que abonarle en el año”.

“No entiendo qué me tratas de decir”, le dijo Rommel P. Entonces, el hijo de Abad le habría explicado que de esos $ 3.200 debía entregarles $ 2.000 y él se quedaba con $ 1.200.

Él les dijo que no le iban a alcanzar porque tenía que pagar arriendos en Guayaquil y Quito, servicios básicos y la manutención de su hija.

Regateando, quedaron en que él les pagaría $ 1.700 y se quedaría con $ 1.500. El pago se haría en efectivo no por transferencias.

Rommel P. afirmó que salió molesto de la reunión, pero aceptó porque necesitaba el empleo.

Siguió laborando normalmente en diciembre. Aseguró que quien le daba las órdenes en su área era Carolina M., la nuera de Abad. “Ella me daba el ok para subir publicaciones a las redes de la Vicepresidencia”, aseguró en su testimonio.

Según el texto que leyó la Fiscalía, Rommel P. declaró que Francisco Sebastián B. A. le dijo que iría la primera semana de enero del 2024 a Quito para cobrar lo acordado.

El acusado ingresó a la Vicepresidencia, lo llamó y le dijo que fuera al baño a entregarle el dinero, pero el periodista dijo que no, que fuera a su despacho.

En el sitio conversaron sobre los cambios que se harían en la Vicepresidencia. Rommel P. le manifestó su preocupación porque se había anunciado que desaparecerían todas las coordinaciones. Francisco Sebastián B. A. le pidió que no se preocupara y le ofreció otro cargo. “Tranquilo, que yo doy la autorización para que te pongan en la Dirección de Monitoreo Internacional”, le habría dicho.

Luego, Francisco Sebastián B. A. le pidió que le pagara lo correspondiente al mes de diciembre. Rommel P. le ofreció disculpas porque no tenía el dinero completo, solo $ 900, y le prometió que el mes siguiente le pagaría todo completo más la deuda.

El hijo de la vicepresidenta supuestamente no aceptó esa propuesta y salió enojado: “No te puedo ofrecer el otro trabajo si no me cumples con este”, le habría reclamado.

Según la narración del testigo, Rommel P. fue notificado en febrero de que ya no pertenecía a la Vicepresidencia. Aseguró que trató de comunicarse con Abad y Daniel R., pero no le contestaron.

Luego logró hablar con Francisco Sebastián B. A., quien supuestamente se mostró preocupado por el despido de Rommel P.

El periodista le recordó que le había ofrecido otro puesto en la institución. Él le dijo que cuando estén disponibles lo llamaría.

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Rommel P. le dijo que no se olvide que aún debía hacerle los abonos ofrecidos y que le proponga una fórmula de pago. El procesado le respondió que debía darle $ 2.100 y que “con esa ganga” lo esperaba en Cuenca.

Rommel P. les contó todo lo que estaba pasando a sus padres, quienes se molestaron tanto que querían reclamarles a los involucrados.

El periodista señaló que le salió la oportunidad de viajar a Nueva York, pero que no quería irse sin solucionar el tema de la letra de cambio porque no quería generarles problemas a sus padres.

El viernes 15 de marzo, Rommel P. viajó a Cuenca y le cayó “de sorpresa” a Francisco Sebastián B. A. en su oficina, para pedirle que le entregue el documento. Él dijo que no lo tenía, que estaba en su oficina en Quito.

Rommel P. llamó a su mamá para contarle lo que había pasado y ella se enojó. “Me dijo que si no regresaba con esa letra de cambio mejor ni regrese”.

Él volvió al despacho de Francisco Sebastián B. A. y le explicó lo que ocurría con sus padres; él se molestó y le dijo que no debía haberle contado a nadie del tema. Le ofreció pedirle a un pariente que le traiga el documento desde Quito.

Al día siguiente, sábado 16, Rommel P. fue al despacho de Francisco Sebastián B. A., quien le dijo que no podía darle ese documento, solo le permitió tomarle una foto, y lo quemaron, según el relato leído por la Fiscalía. (I)