Son varias las alertas de presencia de metales tóxicos en alimentos que se distribuyen en Ecuador. En las últimas semanas se han reportado estudios académicos y de autoridades que han encontrado productos de consumo masivo contaminados, especialmente con plomo. Sin embargo, el Ministerio de Salud Pública (MSP) no ha realizado exámenes de laboratorio para detectar pacientes intoxicados con ese metal, según lo afirmó el propio ministro Franklin Encalada Calero.
Publicidad
El funcionario hizo esta aseveración ante la Comisión de Derechos de la Salud de la Asamblea Nacional, en una comparecencia realizada el viernes pasado. “No tenemos tamizados los pacientes que están intoxicados por cromato de plomo, por plomo como tal. Puede ser que sí hayan ido a los hospitales, pero acordémonos de que la sintomatología de un intoxicado por plomo es muy florida. Usted lo puede confundir con una gastroenteritis, con una toxinfección alimenticia, con una colitis en un adulto. Son muy diversas”, aseguró Encalada.
De acuerdo con el ministro Encalada, el problema para detectar intoxicaciones en el país se debe a los exámenes de laboratorio. En su comparecencia afirmó: “No tenemos un cuadro propio de intoxicación por plomo (para) que podamos decir: ‘Hágale el examen’, así como pedir una biometría: ‘Hágale un examen de plomo a este paciente’. Es muy específico el examen y no tenemos el laboratorio que nos lo haga; y, si lo tuviéramos, nos cuesta muy caro ese examen”. Y concluyó: “No sabemos cuánta gente está contaminada”.
Publicidad
En el país, la detección de intoxicaciones por metales ha sido mínima. Un análisis de EL UNIVERSO a las estadísticas de egresos hospitalarios más actualizadas mostró que entre 2018 y 2022 se registraron 41 pacientes intoxicados por metales y que uno de estos falleció.
Las cifras no permiten saber cómo se intoxicaron los pacientes. Lo que sí se logro determinar es que los más afectados fueron niños menores de 5 años, pues doce casos correspondieron a esas edades. Asimismo, el metal más tóxico resultó ser el mercurio, con 19 casos, seguido de cobre, con 5, y plomo, con 4.
Las alertas de alimentos contaminados iniciaron en noviembre del año pasado, cuando la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, en inglés) encontró plomo en papillas fabricadas en Ecuador, con las que se intoxicaron decenas de niños. Luego, la FDA también halló cromo en esos productos.
Las investigaciones de la Agencia de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) determinaron que esas papillas se contaminaron por la canela con la que fueron elaboradas. Por ello, estableció que 926 alimentos procesados que que contienen canela y que se comercializan en Ecuador tienen alto riesgo de estar contaminados con plomo.
A la par, un estudio del Centro de Estudios Ambientales y Químicos de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (Cesaq-PUCE) encontró altos niveles de ese metal en dos marcas de salsa de tomate, una de salsa BBQ y una de canela en polvo. La universidad presentó los resultados completos a la Arcsa para que los verifique y alerte a la ciudadanía, pero esta institución no se ha pronunciado al respecto todavía. El Cesaq anteriormente había hallado metales tóxicos en verduras, leche y pescado.
Publicidad
Asimismo, EL UNIVERSO reveló que un estudio financiado por la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario (Agrocalidad) descubrió arsénico en arroz producido en el país.
De momento, la Arcsa ha informado sobre la contaminación con plomo de tres productos: la canela en polvo Los Nogales de Negasmart, la morcilla tipo I de Embutidos Oro y la premezcla para preparar conos sabor a vainilla de Bakels. De acuerdo con la Arcsa, Negasmart proveía canela a Embutidos Oro y Bakels.
Negasmart afirmó en un comunicado que encontró plomo en la canela que recibió de dos de sus proveedores. La Arcsa está haciendo exámenes a esos productos.
El director ejecutivo de la Arcsa, Daniel Sánchez Prócel, informó la semana pasada que se analizarán los 926 productos que contienen canela para determinar si tienen plomo. Los resultados están a la espera. (I)
Publicidad
