‘Para la desaparición de ‘Fito’ se necesitó apoyo de policías, guías penitenciarios y del SNAI’: supuesta evasión refleja infiltración del crimen organizado en entidades

Aunque la “desaparición” de Adolfo M. V., alias Fito, cabecilla de la banda delictiva Los Choneros, se empezó a hablar desde el mediodía de este domingo, 7 de enero, no fue sino hasta las 20:00 que se confirmó que aquel rumor era cierto. De hecho, la Fiscalía abrió de oficio una investigación por la presunta evasión.

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Personal militar y policial entró la madrugada de dicho día al Centro de Rehabilitación Social Guayas n.º 4, también conocido como cárcel Regional, para ejecutar un operativo de Control de Armas, Municiones y Explosivos (Camex), pero no hallaron al reo contra quien desde el 2011 pesa una sentencia de 34 años de prisión por delitos como delincuencia organizada, narcotráfico y asesinato.

Fiscalía abrió investigación por la presunta evasión de alias ‘Fito’ de la cárcel

En agosto del año pasado, alias Fito fue trasladado de la cárcel Regional a La Roca, reclusorio considerado de máxima seguridad, en medio de un operativo en el que participaron 4.000 militares y policías.

El propio presidente de la República de ese entonces, Guillermo Lasso, difundió en su cuenta en la plataforma X, antes Twitter, fotos del cabecilla de Los Choneros en el patio del centro carcelario, en el piso, con las manos esposadas.

Pero en septiembre un juez acogió la solicitud presentada por sus abogados para que se respete una decisión judicial anterior que prohibía que lo trasladen a otra prisión por cuestiones de seguridad y entonces él volvió a la cárcel Regional, en medio de los cuestionamientos del Gobierno y de la ciudadanía en general.

La mañana de este lunes, 8 de enero, la búsqueda de Fito continúa en dicho reclusorio. Más de 3.500 militares y policías intervinieron la cárcel, incluso con la ayuda de tanquetas y drones. Trascendió, además, que tres guías penitenciarios fueron detenidos y trasladados hasta la Fiscalía del Cuartel Modelo para ser sometidos a una audiencia de flagrancia.

Se los investiga por complicidad en la supuesta evasión de Fito y otros reos.

Katherine Herrera, académica y consultora en seguridad pública y de Estado, sostiene que la “desaparición” de Fito confirma que el control de los centros de rehabilitación social lo tienen los grupos de delincuencia organizada (GDO).

También, según ella, que el Estado no ha logrado contrarrestar esta situación a pesar de los estados de excepción decretados (en el gobierno anterior) y del cambio de autoridades del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), ente encargado del manejo de las cárceles del país.

“Para esto se muestra que hubo apoyo de los mismos guardias penitenciarios, que hay apoyo de los mismos integrantes del SNAI, que hay apoyo de la misma Policía Nacional, de Fuerzas Armadas, del Ministerio del Interior que pasan esta información, porque da la coincidencia que una vez que en la radio comenta el presidente (Daniel Noboa) que van a existir tres cambios, existe esta fuga”, opina Herrera.

Para la especialista, fue un error del mandatario anunciar esos cambios. Esto con relación al anuncio que hizo el presidente de la República días atrás durante una entrevista. “Tenemos un plan bonito, pero no se lo cuente a Fito...”, expresó el mandatario.

Para la consultora en seguridad pública y del Estado, ”hay una filtración terrible en las entidades de fuerza pública, que están manejando y operando con las estructuras criminales. Para la salida de la cárcel, para la huida, para el escape de Fito, obviamente, se necesitó apoyo de Policía Nacional, de guías penitenciarios, de trabajadores del SNAI, de trabajadores de las instituciones a cargo de la seguridad interna”, menciona ella y añade que se requiere una depuración de las entidades.

Para Herrera, es vital que en esta gestión del nuevo gobierno contra el crimen organizado se establezcan cuántos GDO operan en Ecuador y cuántos militantes tienen estas bandas para saber a qué se enfrenta.

Por su parte, Alexandra Zumárraga, exdirectora de rehabilitación social, señala que la aparente evasión de Fito de la cárcel Regional refleja que el plan Fénix no se ha implementado aún en el sistema penitenciario.

Esto se sabe de la supuesta evasión de alias ‘Fito’ hasta este lunes

“Las grandes cárceles las manejan las mafias, en los días de festividad del 31 de diciembre se hicieron grandes celebraciones con juegos pirotécnicos, inclusive a vista y paciencia de todas las autoridades. Si Fito estaba preso era por su propia voluntad, porque él hace y deshace igual que otros capos en las cárceles como Turi y Cotopaxi; entonces, no existe el plan Fénix al menos en las cárceles”, expresa ella.

La mañana de este lunes, Roberto Izurieta, secretario de Comunicación del Gobierno, reconoció que posiblemente hubo infiltraciones que se produjeron para la posible desaparición del interno.

“Lo más probable es que se dieron infiltraciones y fue cuestión de horas”, dijo Izurieta al ser consultado sobre la posible fuga de alias Fito, en una entrevista con la televisora Teleamazonas. (I)